Desde hace mucho tiempo se ha convertido en una especie de mantra que me acompaña y que allá por donde voy manifiesto: no sé cuándo terminará esta crisis pero nada volverá a ser como antes. Si me permiten, voy a hacer un poco de reflexión con datos basados en el estudio llevado a cabo por el departamento de investigación del IEB, el anuario Inversis 2012. Desde hace ya tiempo, la familia española viene diversificando su patrimonio financiero, antiguamente había depositado la fidelidad de su ahorro o custodia del mismo a la entidad de toda la vida, asimismo la mayor parte del patrimonio de la familia española se materializaba en su propia residencia, prestando menor atención a otro tipo de inversión y las necesidades que ello conllevan como es el asesoramiento.
La crisis ha comenzado a introducir modificaciones, pues un 97% de los españoles recurren a algún tipo de asesoramiento. Si analizamos los datos del estudio demoscópico en el ejercicio 2012, más de un 50% de inversores, con más de 20.000 euros disponibles para invertir, tenían dos o más asesores para tomar decisiones.
En este mismo ejercicio, se ha incrementado de forma considerable el número de personas que han buscado asesoramiento independiente: fiscalistas, economistas y abogados; concretamente se ha pasado del 40% al 47,5%. Sin embargo, en esta búsqueda de asesores por parte de los inversores ha descendido el número de personas que han recurrido a un asesor financiero independiente, concretamente se ha pasado del 36% al 24,8%.
¿Qué está ocurriendo para que los asesores independientes hayan perdido protagonismo? Quizá la respuesta la tengamos en el grado de satisfacción que el inversor muestra con los mismos, en este sentido prácticamente la mitad está satisfecho pero la otra mitad no lo está y aquí hay un claro deterioro respecto al año precedente pues la satisfacción baja en casi 20 puntos porcentuales.
Preferentes, deuda subordinada, convertibles, hipotecas cláusulas suelo… han puesto o deberían haber puesto de actualidad, me atrevería a decir en valor, la figura de los asesores independientes, puesto que son problemas localizados en las redes bancarias. Los inversores manifiestan claramente cuáles son las características que debe tener el asesor financiero: el 80% desea que sean independientes, el 59% considera crucial la formación como el principal valor de un asesor financiero y la experiencia es fundamental para el 64%. Estas características muy remarcables son las que deberían ser analizadas por parte de los agentes financieros independientes para revertir la tendencia mostrada durante el año 2012.
*Miguel A. Bernal Alonso será ponente de la jornada "Agentes Financieros y EAFIS: Presente y futuro del asesoramiento financiero", que el 4 de julio celebra Inversis Banco en Madrid. Para inscribirse en la jornada, es necesario pinchar en esta dirección.