"Hoy en día crear una gestora en China siendo sólo una persona, es completamente imposible"

Los inversionistas latinoamericanos, tanto institucionales como retail, no son los únicos que ven con interés al continenten asiático. Algunas gestoras como BRAM o LarrainVial ven oportunidades de crecimiento en la región y están desarrollando estrategias para llegar a los inversionistas de esta parte del mundo, sobre todo, en China ante la creciente liberalización de sus mercados. Mientras que los fondos UCITS siguen siendo la forma más sencilla de entrar en el continente, existe la posibilidad, como han hecho otros gigantes de la industria, de crear una oficina local. Fabrice Jacob, CEO y fundador de JK Capital, firma de gestión de activos situada en Hon Kong y con participación de La Francaise AM, nos comenta cómo fue su experiencia cuando le pidieron que creara una gestora en China.

"Empecé la gestora en 1995, en un momento en que China era completamente diferente de lo que es hoy, y sólo unos pocos inversores invertían en el país ya que era un destino muy exótico". La decisión de mudarse no fue difícil. "En ese momento yo estaba trabajando para un banco francés, el cual me pidió que desarrollara una división de gestión de activos en Hong Kong. Hacía diez años que había terminado mis estudios en la ciudad, por lo que estaba contento de volver", explica.

Durante el proceso viviría momentos históricos. "Por ejemplo, empecé el proyecto dos años antes de que Hong Kong pasara a formar parte de China. Era la primera vez que algo como esto sucedía, es decir, que un país capitalista se 'traspasara' a un país comunista. La gente estaba preocupada por lo que podría pasar. Yo pensé que se trata de un momento fascinante, porque estábamos escribiendo Historia".

¿Qué fue lo más difícil a la hora de desarrollar la gestora en China?

Una de las mayores dificultades durante la etapa inicial del proyecto era encontrar clientes, ya que China era un destino muy exótico. Podrías encontrar algunos inversores en Japón y Corea, pero fue difícil convencer a la gente de que China se convertiría en un país para invertir. Ahora el país ha cambiado drásticamente. Diría que, en los últimos 20 años, no hay ningún país en el mundo que haya cambiado tanto como China (para saber más sobre sus perspectivas para el país, lea el siguiente artículo).

¿Cómo fue y es en la actualidad la relación con el regulador?

Dado que nuestra gestora se encuentra en Hong Kong, trabajamos con el regulador local, y al igual que cualquier otro regulador, ha experimentado muchos cambios durante estos años. Cuando empecé con esta empresa en 1995, era relativamente fácil constituir una empresa, conseguir la licencia y comenzar a recaudar fondos y gestionar ese capital. Hoy en día, hacer algo como esto, si eres una sola persona, es completamente imposible. Pero supongo que esto se aplica a todos los reguladores de todo el mundo que han cambiado después del 11 de septiembre, Madoff, todos los escándalos y las catástrofes que hemos tenidos en estos años.

¿Qué recomienda para los gestores y las empresas de gestión de activos que quieren iniciar sus operaciones en Asia?

Olvida todo lo que haces en Occidente. Desde el panorama, la forma de ver a las empresas, de analizarlas... todo es completamente diferente. Hay que ser muy suspicaz, muy cuidadoso. En China tienes que centrarte en ciertas cosas que por lo general no prestas atención cuando trabajas e Occidente. Por ejemplo, tienes que prestar atención al Gobierno Corporativo. Necesitas saber con quién estás tratando, su perfil, quién es el presidente, el consejero delegado, el director general de la compañía que estás analizando... todo esto para entender quiénes son. Es importante tomar en cuenta que en China es fácil cambiar los nombres. Esto me lleva al otro elemento que hay que prestar atención: lo que llamamos conexiones transaccionales. Es decir, todas las operaciones que se puedan producir entre una sociedad cotizada y todas las empresas que pertenecen a una misma persona. Tienes que buscan transparencia, necesitas conocerles, visitar las fábricas... hay que hacer trabajo de campo. Estas son cosas que no se suelen hacer en Europa, pero que en China simplemente no inviertes sin visitar las fábricas, si no compruebas por ti mismo lo que está en el suelo.

¿Cuáles son las principales características de los inversores chinos? ¿Cuáles son sus inversiones favoritas?

Los inversores de China Continental tienden a tener un horizonte de inversión de corto plazo, buscan resultados inmediatos. Tienden a actuar impulsados por el momento, es decir, no son del tipo de  inversores que se pueden encontrar en Occidente: más sofisticado y que actúan contrarios al los movimientos del mercado, lo que significa que compran cuando el precio del mercado es bajo y venden cuando está alto. Los inversionistas chinos tienden a seguir a la multitud.

También tienden a tener la última palabra en cuanto a sus inversiones. Lo que quiero decir es que cuando tratan con los bancos, por ejemplo, no suelen otorgar mandatos discrecionales. Ellos tomarán la decisión final, que es una gran diferencia con respecto a los inversores occidentales.

Asimismo, también tienden a centrar su atención en los activos físicos, como el oro o las propiedades. No suelen comprar acciones, son muy escépticos al respecto debido al pobre desempeño que ha registrado la Bolsa local en los últimos años. En cuanto a la renta fija, los inversores chinos no le ven el lado positivo a este tipo de inversión. Actúan más como jugadores, quieren duplicar o triplicar su dinero de una manera similar que en un casino.