Henderson: ¿Qué le aguarda ahora al presidente Hollande?

Para Sarkozy, un cambio de política tan flagrante habría resultado embarazoso, cuando no imposible. Para Hollande, resulta relativamente sencillo, por cuanto ha sido elegido precisamente para ello. ¿Aceptará Alemania este cambio de postura por parte de Francia? Probablemente sí, ya que de no hacerlo se arriesgaría a quedar aislada dentro de la zona euro. ¿Se lo perdonarán los mercados? Probablemente también, ya que de lo contrario Europa podría terminar convirtiéndose en un caso de manual de la conocida Paradoja del Ahorro. Lo que el médico debería prescribir en estos momentos es sustituir la política de drásticos recortes aplicada hasta ahora por otra orientada a reactivar la economía europea.

Por nuestra parte, y pese a lo difícil del entorno, seguimos considerando posible construir una cartera de valores cuidadosamente seleccionados, de elevada liquidez y atractivamente valorados. En un momento en el que los líderes del mundo occidental intentan denodadamente elevar las expectativas de inflación, nos inclinamos por aquellas empresas internacionales que, pese a estar domiciliadas en Europa, encierran potencial para ofrecer unas magníficas rentabilidades al inversor paciente, más aún si tenemos en cuenta las valoraciones extraordinariamente atractivas a las que cotizan. Como siempre, el bien más escaso y valioso es la paciencia.