Henderson considera atractivos los bonos corporativos de large caps

2010 fue un año de selección y de toma de posiciones en el mercado de crédito pero todo cambió a finales de año, con los problemas de la Europa periférica, principalmente en Grecia e Irlanda. 2011 estuvo marcado por fuertes shocks que hicieron baladí la cuestión de dónde estar invertido, porque el mercado no distinguía entre valores buenos o malos. Un año sin dispersiones y de frustración para los gestores, en definitiva. Pero la situación podría cambiar este año para el mercado de crédito, según Chris Bullock, gestor del fondo Henderson Horizon Euro Corporate Bond. “2012 será una combinación de los dos años anteriores, pues ahora hay verdadera conciencia de la situación en Europa, lo que llevará a los políticos a tomar medidas”. Por eso calcula que en el mercado de deuda corporativa habrá más dispersión –las empresas débiles lo harán peor y los mejores tendrán mayores rentabilidades-, es decir, “habrá movimiento entre sectores y compañías”, afirma el gestor.

 

Y todo, en un entorno marcado por ciclos más cortos y abruptos en los que las bajadas de un año se compensan con las subidas del siguiente y viceversa…“Los activos seguros tendrán retornos negativos, la renta variable atravesará una difícil situación porque necesita crecimiento, así que, para el inversor que busque retornos reales y liquidez dentro del universo de renta fija, los bonos corporativos resultan atractivos”, explica. Y dentro del activo, apuesta por el crédito de empresas de mayor capitalización y con grado de inversión, es decir, aquellos de mayor calidad. “Un escenario donde los bancos aún se están desapalancando resulta positivo para este tipo de crédito, el de entidades con liquidez que no dependen de los bancos sino de los inversores”, comenta.

 

El fondo de Bullock es un producto muy flexible en el cambio de estrategias en función de las situaciones de mercado, aunque su asignación suele ser defensiva incluso cuando toman más riesgo. “En ese caso tomamos riesgo en activos de calidad”, indica. “Intentamos participar en las subidas de mercado pero disminuimos exposición si cambian las condiciones”, explica el gestor, cuyas claves son ser “buen selector y lo más humilde posible”.

 

El universo de inversión está formado por 400 compañías de gran capitalización, utilizando como índice de referencia el iBoxx Euro Corporates Index. Pero con una gestión activa, pues sólo lo siguen en un 50%. “No nos conformamos con caer menos que el índice, queremos proteger capital”, indica. Al menos el 80% del patrimonio ha de estar invertido en bonos con grado de inversión emitidos en euros y el 20% restante puede posicionarse en high yield o liquidez, con una gestión flexible de la duración mediante derivados y en un rango que puede ir desse dos a menos dos años. El gestor no toma riesgo divisa fuera del euro.

 

Sobreponderados en deuda pública
De hecho, en ese 20% que puede estar fuera de bonos corporativos con grado de inversión, también caben posiciones en deuda pública. Bullock compró mucho gilt o deuda británica en 2008, hasta un 20% de la cartera, pero en marzo de 2009, con el rebote, lo redujo al 1%, lo que prueba la flexibilidad del fondo. Ahora tiene algunas posiciones sobreponderadas en deuda alemana y estadounidense de corto plazo, no porque sea positivo en el activo sino en espera de atractivas oportunidades de inversión “para poner el dinero a trabajar”. “Es posible que aumenten las rentabilidades pero hay una gran huida desde los bonos locales hacia los activos libres de riesgo como el Bund de Alemania y el riesgo de subida de tipos de interés por parte del BCE es muy bajo”, afirma el gestor.

 

Por países las máximas asignaciones del fondo están en Reino Unido, Francia, Alemania y también EEUU. En la parte española, que juega a través de bonos corporativos, apuesta por firmas defensivas como Telefónica, Red Eléctrica o EADS, entre otras. Por sectores, infrapondera financieras dada la vulnerabilidad del riesgo polítito y regulatorio, así como materiales básicos y sectores de consumo, mientras ve valor en telecomunicaciones y paquetería, sobre todo en el segmento high yield.

 

Lanzado en diciembre de 2009, el fondo se caracteriza por una gestión activa frente al benchmarck, con una selección de valores con convicción, aunque los pesos son limitados. El asset allocation y selección se revisan de forma periódica, y en las decisiones pesan tanto los factores macro como los fundamentales. Desde lanzamiento el fondo gana casi un 4% anual.

 

Henderson tiene activos bajo gestión de 75.000 millones de euros de los que una cuarta parte corresponden a renta fija y dentro de ese universo, dos tercios corresponden al negocio de crédito.