Henderson: Aún hay valor en crédito gracias a la buena salud de las compañías y la alta liquidez

Tras el propicio momentum para invertir en crédito de los últimos años ante la progresiva recuperación desde la crisis crediticia, los analistas parecen estar de acuerdo en ya se ha hecho todo el dinero fácil, pues la mayoría de valor también se ha esfumado en el activo. La clave está en cuánto valor queda aún en el mercado y en cómo encontrarlo. Stephen Thariyan, director de crédito de Henderson, reconoce que éste es uno de los escenarios más complicados que ha visto en dos décadas y asegura que su complejidad requiere una cartera flexible. Eso sí, asegura que los mercados ofrecen oportunidades, en ocasiones escondidas, que hay que encontrar pues “la renta fija empresarial está en mejor estado que antes de la quiebra de Lehman Brothers gracias a los estímulos” que aún permanecen.

De hecho, considera que la liquidez existente merece que los diferenciales, al menos de las entidades financieras -actualmente en torno a 160 puntos básicos- se estrechen aún más, teniendo en cuenta que antes de la crisis se situaban en torno a 60 puntos básicos. El resto de sectores no financieros, como energéticas, utilities o farmacéuticas, están más caros, pues ya cotizan cerca de los 100 puntos básicos.

Para el experto, los argumentos positivos para invertir en el activo se centran sobre todo en la buena salud de las compañías, mucho mejor que la de los estados, pues mientras la deuda gubernamental está aumentando, las empresas en general han reducido el apalancamiento y la base de costes. Además se espera que los riesgos de impago permanezcan bajos. Otros factores a favor es que el crédito ofrece atractivos rendimientos comparados con los de la liquidez y los bonos gubernamentales (con rentabilidades cercanas a cero) y por tanto es una alternativa menos arriesgada que la de la renta variable, más aún cuando los tipos base siguen cerca de los mínimos históricos. Además, la gestora considera que el mercado de bonos corporativos europeos tiene una duración relativamente corta, con excelente profundidad y liquidez. Como puntos en contra, señala la vuelta de la inflación, el posible final del mercado alcista, los riesgos en la deuda periférica europea –si bien hay oportunidades-, o las concurridas posiciones en el activo.

En este escenario, Henderson apuesta por una serie de fondos de renta fija flexibles y activos, que puedan contar con derivados para expresar puntos de vista positivos y negativos sobre el crédito. “Hay que ser cauteloso en este escenario para explotar toda la oferta denominada en euros y nuestros fondos tratan de captar ese valor”, comenta Thariyan, con una filosofía que prioriza la gestión de los riesgos bajistas y evitar las pérdidas. “Hemos diseñado un fondo para un escenario complicado y uno de los factores que nos ayudan es su moderado tamaño”, comenta el gestor.

Se refiere al fondo Euro Corporate Bond Fund, del que podría decirse que es la versión long-only y con duración del Credit Alpha. Creado en diciembre de 2009, comparte el mismo equipo gestor, formado por Stephen Thariyan (director de crédito de Henderson), Thomas Ross y Chris Bullock, y su objetivo es IBoxx Euro Coporates Index +1% (sin comisiones). En cuanto a su universo de inversión, al menos el 80% de la cartera debe invertirse en bonos corporativos con calificación crediticia emitidos en euros, mientras que el 20% restante corresponde a emisiones fuera del benchmarck, ya sea en otras monedas diferentes al euro, deuda high yield o CDS que permiten posicionarse cortos. Las posiciones en high yield suponen un 20% de la rentabilidad del fondo, al igual que la de los derivados de crédito, mientras la mayoría de los retornos deriva del stock picking, en un 50%. El 10% restante procede de la gestión activa de la duración, por lo que la fuente de retornos está diversificada. Los analistas cuentan además con su patrimonio invertido en el producto.

La posición actual del fondo evita los mercados periféricos y está concentrado en los activos con calidad A y BBB. En los últimos meses, ha reducido las posiciones en la deuda financiera senior, pues cree que hay más valor en los bonos subordinados; también ha tomado beneficios en mineras y metalúrgicas y empeorado sus perspectivas sobre bienes y servicios de consumo, viendo un valor limitado asimismo en utilities, que infrapondera con fuerza.

El fondo pertenece a la categoría UCITS III y fue el primer fondo de renta fija registrado dentro de la sicav Horizon domiciliada en Luxemburgo. También registrado en la sicav recientemente está el Henderson Credit Alpha, que busca generar retornos positivos mediante sus tres estrategias (pair trades, temática y táctica) usando CFDs y bonos corporativos para reflejar ideas de inversión y temas tanto en bonos de alta calidad crediticia como en bonos high yield. Lanzado en julio de 2007 y gestionado por el mismo equipo que el anterior, se trata de un auténtico fondo de crédito long/short con liquidez diaria que ofrece controles de riesgo institucional, transparencia y un objetivo de retorno factible. Tiene un objetivo de retorno de Libor tres meses +5% y una volatilidad típica y un rango VaR de 3-6%.