Goirigolzarri: “Los fondos de inversión han pasado a tener un atractivo que no tenían”

BKcom_IMG_Goiri_foto3_alta-1
Cedida

Bankia tiene una nueva estrategia de captación de pasivo. Si el año pasado se vio obligada a pagar tipos elevadísimos en los depósitos para sobrevivir en medio de una complicada situación de liquidez, ahora las circunstancias han cambiado de forma radical y ha decidido dejar algo de lado estos productos para centrarse en los fondos de inversión. Su presidente, José Ignacio Goirigolzarri, lo ha dejado claro en la rueda de prensa de presentación de resultados: “Los fondos de inversión han pasado a tener un atractivo superior al que tenían antes”.

Las razones que argumenta esta nueva estrategia de la entidad son varias: el Banco de España ha recomendado no pagar extratipos en los depósitos y ha puesto coto a la guerra que se vivía hasta ahora; los mercados de financiación se han abierto al fin, y sobre todo, Bankia cuenta ahora con una posición de liquidez holgada (39.700 millones de euros) que le permiten no tener que centrarse en la captación de depósitos.

Esta posición de liquidez, ha explicado el presidente, “nos da una gran capacidad de atender las necesidades del cliente y poder adaptarnos más a ellos”. En la práctica, eso está suponiendo que las recomendaciones de la entidad son hacia la suscripción de fondos de inversión, que están ofreciendo rentabilidades superiores que los depósitos (el límite está en el 1,75% a un año cuando por ejemplo, su último fondo de rentas, el Bankia Garantizado Rentas 7, abona un rendimiento anual del 3,2%). Además, estos productos ofrecen un retorno superior para la entidad.

De momento, esa nueva estrategia, implantada a comienzos de año, cuando llegó la limitación a los extratipos y la liquidez a la entidad (tras el traspaso de activos a Sareb y la llegada de fondos europeos), todavía no se refleja en las cuentas de que la entidad ha presentado, correspondientes a 2012.

De hecho, en esas cifras, aparece una disminución del 16,5% en el volumen de fondos de inversión gestionados, que caen a 6.460 millones, y del 12% en los fondos de pensiones, que descienden a 4.777 millones. Mientras, también sufrieron los depósitos, por las “turbulencias” que se vivieron a mitad del año pasado, según las palabras del presidente. Aunque la evolución de los depósitos estrictos de clientes prácticamente se mantuvo estable en 98.500 millones, el desglose muestra un deterioro importante. Las cuentas a la vista vieron salir 7.633 millones, hasta 35.727 millones, y el resto de depósitos minoristas a plazo otros 8.020 millones.

Con todo, la entidad sigue teniendo un peso muy fuerte de depósitos frente a los fondos de inversión, que apenas suponen un 6,56% de los depósitos.

Tres años para dejar de ser pública

La nueva estrategia de captación de pasivo tiene, entre otros objetivos, conseguir que la entidad sea rentable. Es el reto principal que se ha fijado Goirigolzarri para su plan de reestructuración de la entidad, que confía que aporte una “gran rentabilidad” para los contribuyentes y que en 2015 se hayan conseguido todos los objetivos para que el Estado pueda salir del capital de la entidad. Su preferencia sería que lo hiciera a través de la venta en bolsa, lo cual le permitiría seguir operando en solitario en lugar de ser absorbida por alguna otra entidad. El banquero insistió en que Bankia es la única entidad de las nacionalizadas que está en disposición de devolver el capital que el Estado le ha inyectado, incluso con rendimientos adicionales.

De momento, para este ejercicio su matriz BFA confía en conseguir unos beneficios de 800 millones de euros, después de haber perdido 21.238 millones el año pasado. Bankia, la entidad cotizada del grupo, tuvo unos números rojos de 19.193 millones.