La agencia de valores Gestiohna recomienda la inversión a largo plazo, con un horizonte temporal superior a dos años, como solución a la nueva subida de impuestos temporal. “Uno de las razones por las que podemos apostar por esta fórmula es que la nueva reforma sigue manteniendo en los fondos de inversión la supresión del peaje fiscal por cambiar de fondo. De este modo, un ahorrador podrá seguir cambiando de fondo todas las veces que quiera sin tener que dar cuenta a Hacienda, permitiéndole, no sólo consolidar plusvalías mediante el traspaso a fondos monetarios sino también hacer una gestión dinámica de las inversiones para adecuarlas a las condiciones del mercado o a sus circunstancias personales”, explica Ricardo Sánchez-Seco, responsable de fondos de Gestiohna.
Por otro lado, Sánchez-Seco pone de relieve otra de las ventajas que tiene invertir a través de fondos. “El inversor es quien decide cuándo paga a Hacienda. Existe un equívoco basado en el planteamiento de que al final siempre se va a pagar sobre los beneficios obtenidos, sea cual sea el producto financiero con el que hayan sido generados, pero en la práctica esto no es del todo cierto”, aclara el experto.
Otro de los aspectos positivos que señala el responsable de fondos de Gestiohna a la hora de invertir en fondos, es la posibilidad de reducir notablemente la factura fiscal final. En este sentido explica “en materia de inversiones no siempre se acierta y al cabo del tiempo se puede tener alguna minusvalía. Al poder compensar con minusvalías los incrementos patrimoniales, el inversor en fondos puede escoger el momento en que cuente con minusvalías en distintos elementos patrimoniales –ya sean fondos, acciones, etc – para disminuir su factura fiscal vía compensación de plusvalías.”
Una vez aliviada la inquietud en materia de rentabilidad fiscal, otro de los aspectos que deben tener en cuenta los inversores es la rentabilidad financiera de las inversiones. A este respecto, es necesario esperar a ver si se alcanzan acuerdos de largo alcance en el ámbito europeo, para que mejores el panorama económico global y el de los mercados, en general. “En este caso, una remuneración menor para los depósitos ante unos tipos de interés bajos y menores tensiones de liquidez, favorecerán en gran medida la rentabilidad de los fondos de inversión y el patrimonio”, prevé Sánchez-Seco.