Fuera del Mapa

Kamil Molendys, Unsplash

No es un juego nuevo, de hecho su tercera entrega salió ya hace unos meses. Pero, al buscar un título sobre el que escribir, reencontré este producto de la empresa Naughty Dog.

UNCHARTED: EL TESORO DE DRAKE vio la luz en noviembre de 2007 y logró que el tesoro de Drake se valorara en un millón de copias vendidas en 10 semanas.

Considerado como la respuesta masculina al otro gran mito de los videojuegos de aventuras, Tomb Raider, e hijo por derecho propio de Indiana Jones, este título nos presenta a Nathan Drake, arqueólogo, pícaro, embaucador y caballero tras la pista del tesoro de su antepasado, el capitán Sir Francis Drake.

Como en todo buen clásico, necesitamos la ayuda, sabiduría y apoyo de un compañero, que en este caso toma la forma de nuestro mentor y amigo Víctor Sullivan. Juntos, los dos personajes recorrerán museos, atravesarán selvas, saltarán cascadas, encontrarán submarinos alemanes en el Caribe y harán frente a múltiples peligros y enemigos.

Dos años después, en 2009, llegó la segunda entrega con el título de UNCHARTED 2: ENTRE LADRONES, cuya trama transcurre en Nepal, Estambul, Indonesia y el Himalaya. Sigue los derroteros de la primera entrega: buscar pistas y piezas que encajen en rompecabezas mientras corremos, saltamos, peleamos, nos disparan y pasamos las mil y una.

Finalmente, llegamos a 2011 y, si algo funciona, ¿por qué arreglarlo? Así que se incorpora a las estanterías UNCHARTED 3: LA TRAICIÓN DE DRAKE, en el que saltamos entre Reino Unido, Colombia, Francia y Arabia.

En cada una de las ediciones se ha mejorado la movilidad y la interacción con el entorno, además de la mejora gráfica que trae consigo el paso del tiempo. En la última entrega, vamos encontrando dinero que podemos usar para mejorar nuestro armamento y equipo tanto en el modo campaña, como en el multijugador.

Reconozco mis debilidades, y este juego ha dado en el clavo conmigo, ya que formar parte de las aventuras de Nathan Drake es como ver una de esas antiguas películas de la RKO o la Universal, cuando el continente africano, Asia, e incluso las selvas de Centro y Suramérica eran aún terreno sin explorar y lleno de secretos. Sientes ese cosquilleo cuando, detrás del próximo recodo del camino o en algún sótano, puedes dar con algo único y que el resto de los mortales da por desaparecido o simplemente ignora su existencia (creo que aplaudí cuando en la laguna de la cascada en la primera entrega aparecen los restos de un submarino nazi, corroído y cubierto por la selva).

Otras de las cosas que me gustan de la saga de UNCHARTED es la durabilidad de cada título, ya que es un juego que cuesta consumir en poco tiempo, no sólo siguiendo la línea argumental propuesta, sino que puedes recrearte en los diferentes entornos. No paro de maravillarme y admirar a los equipo que trabajan durante años en crear estas joyas virtuales, mejorando, puliendo y perfeccionando hasta la ultima arista y efecto de luz y textura.

En resumen, una saga completa y divertida, que además está disponible en un paquete con los tres capítulos y con gran cantidad de merchandising para aquellos apasionados de las colecciones. También se está pensando en llevar este juego al cine (esperemos que tengan criterio para no destruir la idea básica del juego con un guión absurdo, actores imposibles y, sobre todo, ojalá cuenten con el dinero suficiente para hacer una obra de calidad).