¿Fondos o depósitos? A igualdad de condiciones, la fiscalidad marca la diferencia

En su última newsletter, Ahorro Corporación Gestión analiza qué mayor rentabilidad recibe el cliente que invierte en un fondo respecto al que invierte en un depósito. "El nuevo gravamen a los rendimientos del ahorro ha establecido una nueva escala impositiva efectiva, en principio, para los rendimientos generados en 2012 y 2013. Esto ha permitido que, en iguales condiciones de rentabilidad, los productos con duraciones mayores a los dos años ofrezcan rendimientos financiero/fiscales superiores respecto a los de duraciones cortas", explican desde la gestora.

 

Tal es el caso de los fondos de inversión. Éstos permiten al partícipe decidir cuándo aflorar las plusvalías y diferir el pago de impuestos hasta pasados esos dos años de mayor gravamen, traspasando las rentas generadas a otro fondo de inversión. Junto a la ventaja de este menor gravamen, los fondos permiten capitalizar el 100% de las ganancias, ya que la retención por parte del fisco no se produce hasta el reembolso del capital, frente a la operativa de los depósitos, en los que la retención se produce cada vez que pagan intereses (trimestre, año, etc.)

 

Así, la gestora plantea tres supuestos de inversión en depósitos y fondos, remunerados en todos los casos al 3%. Para ello se han establecido tres importes de inversión diferentes.

 

 

En los ejemplos, Ahorro Corporación Gestión ha considerado que el partícipe rescata todo su capital.