Fidelity: “2012 será duro para el sector pero, a medio plazo, somos positivos”

Sebastián Velasco, director de Fidelity Worldwide Investment para España y Portugal, considera que el sector de los fondos de inversión está en plena fase de adaptación en España por tres variables importantes. Primero, la reorganización del sector bancario y sus consecuencias; en segundo lugar, el bajo nivel de apetito por el riesgo resultado de la crisis de los últimos años “y que todavía nos queda por vivir”, y en tercer lugar el cambio de foco en el destino de las inversiones, que se han pasado de una visión local a una más global, lo que está ocurriendo, apunta Velasco, tanto en renta variable como en renta fija, con un creciente interés por parte de los clientes por las bonos emergentes o el high yield global.

 

“En general, vamos hacia un entorno de mayor protección del inversor, con los fondos como vehículos más de inversión que de ahorro y en el que se aprovecharán mejor las oportunidades de los merados globales, por lo tanto, son todo caminos positivos para el sector”, dice Velasco. “Pero, aún así, viviremos un 2012 duro. El entorno será positivo a medio plazo, pero todavía los fondos no están entre las prioridades de los clientes”.

 

Fidelity gestiona 2.800 millones de euros de clientes españoles y desde la oficina de España cubren Portugal y tienen la responsabilidad compartida sobre Latinoamérica con sus colegas estadounidenses. En España, el equipo cuenta con equipo en ventas, márketing y comunicación y en operaciones, mientras que el resto de funciones se realizan desde las oficinas de la gestora en Luxemburgo. Respecto a sus clientes, en los últimos años ha variado el tipo de inversor en sus fondos y ahora, los principales clientes son los del negocio mayorista, que ellos describen como la comercialización de sus productos dentro de un envoltorio de la entidad comercializadora; en segundo lugar tienen clientes institucionales, y tercer lugar la banca privada.

 

La gestora ha comenzado el año con suscripciones netas en España y más de la mitad tienen como destino sus fondos de renta fija con una gran diversificación entre productos de bonos ligados a la inflación, high yield y deuda a corto plazo. Esto es novedoso porque siempre han sido una casa más centrada en la renta variable y esta capacidad de vender producto de renta fija responde al esfuerzo que se ha hecho desde Fidelity para tener una gama adaptada a las necesidades de clientes del sur de Europa. Esta ampliación de su gama más conservadora fue una de las consecuencias de 2008 cuando las casas eminentemente de bolsa sufrieron la salida masiva de clientes. Entonces, en la gestora decidieron reorganizar su gama y ahora ya están viendo el resultado de esa decisión.

 

“El cliente siempre buscará firmas con nombres buenos, una gestión adecuada del riesgo, que ofrezca niveles de comisión de gestión ajustados y con personas cercanas con las que poder tener una buena relación en la parte comercial”, dice Velasco.

 

En cuanto a productos concretos, en Fidelity detectan actualmente interés en su fondo global de bonos ligados a la inflación, en fondos de bonos de alto rendimiento y en el fondo Fidelity Global Strategic, que es un producto multiactivo de renta fija. En renta variable, detecta todavía poco interés, pero proponen su fondo centrado en compañías de alta rentabilidad por dividendo y fondos con clase de reparto. En este sentido, en la gestora están registrando en España las clases de reparto de sus fondos que antes no traían al mercado español por el poco interés que generaban. “Tiene sentido porque es un producto bueno para el cliente que viene del mundo del depósito, para el que viene del mundo de las acciones y está familiarizado con el cobro de dividendo y para todos aquellos que quieren tener una renta periódica”, explica Velasco.

 

Además han registrado en España la gama completa de sus productos FAST, que son fondos que pueden tomar posiciones a largo y a corto. La gama está compuesta por un fondo market neutral, otro centrado en Europa, otro en Japón y otro en mercados emergentes.

 

Uno de los temas que preocupa en 2012 al sector en la posible futura eliminación de las retrocesiones de comisiones cedidas a los distribuidos que, previsiblemente, MiFID II traerá en los próximos años. “Defendemos que los intereses de los clientes deben de ser lo primero y eso pasa por la eliminación de las retrocesiones de los proveedores a distribuidores cuando esté realiza gestión o asesoramiento”, dice Velasco. “Es bueno para todos: para el asesor porque pone en valor su trabajo, para las gestoras porque nos permite competir en base a nuestros fondos y no a otros temas y para el cliente que sabe que invertirá en el mejor fondo disponible”.

 

Cree que, en un primero momento, las entidades potenciarán los fondos de fondos, “que es una forma distinta de llevar los fondos de terceros al cliente”, pero que a la larga se volverá a dar visibilidad a los productos de terceros. “No nos preocupa. Hay una gran necesidad de transparencia y es importante que el cliente se sienta más cómodo, entendiendo qué paga y por qué conceptos”, dice.