La expansión de la clase media en los mercados emergentes otorga acceso a cuidados médicos básicos a un creciente número de personas. Además, los gobiernos también están aumentando su inversión en sistemas de sanidad pública, ampliando este efecto, según apunta el informe.
“A pesar de la transformación que está viviendo el sector en los mercados emergentes gracias a la mayor riqueza, queda mucho camino por recorrer”, asegura Frank J. Goguen, analista senior y coautor del estudio. “Para invertir en el sector es necesario contar con un sistema fundamental y selectivo, que descubra las compañías de calidad capaces de capitalizar las tendencias seculares de crecimiento inherentes a la sanidad en los mercados emergentes”.
Como ejemplo de las oportunidades y los obstáculos en la industria sanitaria de mercados emergentes, el informe señala a los boyantes sectores farmacéutico y de seguros médicos en China. Sin embargo, el informe señala que China tiene que solucionar la ineficacia en la distribución de fármacos y luchar contra un sistema hospitalario que a menudo proporciona un nivel inaceptable de cuidados al paciente.
El estudio apunta otras tendencias, tanto positivas como negativas. Estas incluyen el crecimiento esperado de la industria farmacéutica en Rusia, así como el abrumador efecto de los gastos médicos para la pobreza del ámbito rural en India.
Brasil, como los otros integrantes de los países BRIC, tiene que lidiar con salas de espera hospitalarias sobrepobladas y operarios de maquinaria médica sin formación suficiente, asegura el informe. Sin embargo The Boston Company ve oportunidades de crecimiento en el sector de seguros sanitarios privados brasileño, así como un incremento en la financiación pública de instalaciones médicas y formación de personal sanitario.
“En estos países emergentes, en última instancia el éxito se va a medir por un incremento en la esperanza de vida, el descenso de la tasa de mortandad infantil y un crecimiento económico saneado”, concluye Goguen.