Tras años de fuerte crecimiento, el patrimonio de las Instituciones de Inversión Colectiva (IIC) extranjeras en España se estanca. Según datos del último boletín trimestral que publica la CNMV, que hacen referencia exclusivamente al volumen de activos en distribución (excluyendo del cómputo los que hay en negocio institucional, mandatos y ETF), el patrimonio que atesoraban las IIC internacionales a cierre del tercer trimestre de 2019 alcanzaba los 177.000 millones de euros, una cifra prácticamente idéntica a la que tenían justo un año antes.
Siendo más concretos, en términos absolutos el crecimiento con respecto a septiembre de 2018 fue de apenas 600 millones, una cifra muy baja en relación al crecimiento vivido por la industria años antes, pero que, si se tiene en cuenta el contexto en el que se ha producido, podría calificarse como muy positivo.
En este sentido, hay que recordar que el balance presentado por el organismo supervisor hace referencia a un periodo especialmente convulso en los mercados financieros y difícil para la industria de gestión de activos en España. La fuerte caída registrada por los activos de riesgo en el cuarto trimestre de 2018 dieron lugar a importantes reembolsos que tuvieron su continuidad en el primer semestre de 2019, cuando los inversores se mostraron especialmente cautos tras la debacle sufrida en la recta final del año anterior, permaneciendo muchos de ellos fuera de mercado y recogiendo beneficios aquellos que se mantuvieron invertidos y empezaron a recuperarse de las pérdidas registradas en 2018.
Ahondando en los datos
Profundizando un poco más en los datos se puede observar una dicotomía entre el comportamiento experimentado en este periodo de 12 meses que va desde septiembre de 2018 a septiembre de 2019 entre los vehículos en formato sicav con compartimentos y los vehículos en formato fondo, ya que mientras que los primeros registraron un crecimiento de activos de aproximadamente 5.400 millones, los segundos sufrieron un retroceso patrimonial del orden de 4.800 millones. En formato sicav había a cierre de septiembre del año pasado 147.350 millones, casi un 4% más que un año antes; en formato fondo, poco más de 30.000, un 14% menos.
Lo que también parece haberse estabilizado es el número de IIC extranjeras (fondos y scav) presentes en el mercado español. Desde septiembre de 2018 hasta septiembre de 2019 el número de vehículos registró un moderado descenso del 0,68%, manteniéndose en torno a los 1.000 vehículos de más de 200 gestoras distintas.
Quizás la mejor noticia para las IIC extranjeras es que, pese a la difícil coyuntura, el sector ha podido defender e incluso arañar cuota de mercado, ya que los 177.000 millones que aglutinaban las entidades extranjeras a cierre de septiembre de 2019 suponían el 36,8% de lo que gestionaba la industria de inversión colectiva en España (fondos y sicav españoles), tres décimas más que un año antes. También es un dato positivo para el sector que, durante esos complicados 12 meses, lograsen ensanchar la base de clientes, con un incremento en el número de partícipes del 3,5%, hasta los 3,1 millones.