Evli Corporate Bond: cómo invertir con criterios ASG y convertirse en el mejor fondo de renta fija europea

Mikael Lundström (Evli)
Foto cedida

Evli Fund Management es una gestora nórdica representada en España por Selinca. Pertenece a un banco privado finlandés que desde diciembre del año pasado cotiza en el Nasdaq. El banco fue creado en 1989 y la gestora cuatro años después. A partir de entonces tanto su patrimonio como su gama de producto han ido creciendo. Hoy gestiona más de 7.500 millones de euros y comercializa 29 fondos de inversión tanto de renta fija (dos tercios de los productos) como de renta variable. Los más importantes –cuatro en total- se gestionan bajo una misma filosofía bottom-up, centrado en el control del riesgo. Uno de ellos es el Evli Corporate Bond, fondo con la calificación Consistentes Funds People que acaba de ser galardonado por Morningstar como mejor fondo de renta fija europea.

Gestionado desde 1999 por Mikael Lundström (en la imagen), es primer cuartil por rentabilidad a uno, tres, cinco, diez y quince años, habiendo estado en el primer durante los últimos quince años. El patrimonio del fondo roza actualmente los 400 millones. Su objetivo es obtener una rentabilidad elevada ajustada por el riesgo a través de la inversión en bonos corporativos europeos con grado de inversión, high yield y bonos nórdicos sin rating. El mínimo rating del fondo es BBB-. Hasta un 20% de los bonos en cartera pueden ser de emisiones sin rating. Habitualmente, un 75% de la cartera está invertida en deuda con grado de inversión y un 25% en bonos de alto rendimiento. El rating de una emisión no puede ser inferior a B-, mientras que la duración de la cartera oscila entre 3 años por encima o por debajo de la del índice.

Sigue una filosofía activa, centrada en el rating real, no el oficial y orientada al largo plazo. Pone el acento en el cupón, dentro de la rentabilidad total del bono. La rotación es normalmente inferior a uno, en tanto que los niveles de efectivo en cartera se suelen mover entre el 2 y el 4%. La cartera está diversificada entre 80 y 100 nombres y una emisión normalmente no suele pesar más del 5%.

El proceso de inversión se basa en compañías que ofrecen valor y tienen flujos de caja positivos, con apalancamiento financiero decreciente y creciente cobertura de la deuda. Utilizan el análisis fundamental del crédito (estados financieros, perspectivas económicas y sectoriales, equipo directivo y términos de la emisión). Evalúan los bonos tanto en términos absolutos como en relativo y seleccionan libremente compañías y sectores sin apego a ningún benchmark. A la hora de hacer la selección, incorporan criterios Ambientales, Sociales y de buen Gobierno (ASG). De hecho, Evli publica cada trimestre una radiografía de sus fondos a nivel de ASG. El rating del fondo desde esta perspectiva es A. De las compañías en cartera, un 70% está cubierto por el Análisis ASG emitido por MSCI.

Además, los constituyentes del fondo pasan un filtro para determinar si cumplen con los principios del Pacto Global de Naciones Unidas. Dichos principios requieren que las compañías respeten los derechos humanos, trabajen contra la corrupción y tengan los factores medioambientales en consideración. Dicho Pacto cubre un 79% de los constituyentes del fondo.

Posicionamiento actual del fondo

Actualmente, continúan sobreponderando BBB y bonos sin rating en su mayor parte nórdicos e infraponderando los bonos grado de inversión más sensibles a los tipos de interés. La cartera tiene una rentabilidad a vencimiento del 2,25% y una duración modificada de 3,88. El equipo de Evli está negativo en bonos del gobierno y cree que la poca demanda en este segmento mantendrá fuerte la demanda por papel a corto plazo con mayor rentabilidad. “Las compras del BCE benefician de momento a todo el mercado, aunque la futura política de la Fed es un riesgo a tener en cuenta junto con los riesgos políticos en Europa”, afirman.

Los defaults son otro de los puntos fuertes: la tasa está en 1,9% -cercano a la media de siete años de 1,7%- y en la gestora opinan que seguirá siendo baja a futuro porque el apalancamiento de las nuevas emisiones ha permanecido en niveles reducidos y los primarios han tenido como finalidad principalmente la refinanciación.

Por otro lado, la tasa de recuperación ha aumentado hasta el 44% y la proporción de deuda problemática está en un 1-2%. “Aunque los diferenciales se han contraído mucho en high yield, la composición de los índices tiene ahora mucha mayor calidad que en el pasado y aún pueden estrecharse más”, indican. En la gestora están sobreponderando high yield en su asignación de activos y creen que los fundamentales de estos bonos están mejorando. Encuentran mayor potencial en bonos nórdicos y nombres con rating B.