Europa emergente: un mercado con potencial después de la crisis

Apostar por las economías de la Europa del Este hubiera podido parecer una locura hace unos meses. Cuando la crisis financiera se encontraba en su punto álgido, estos mercados se encontraban entre los más perjudicados del planeta, algunos incluso cercanos al default, debido a su alto grado de endeudamiento y la elevada dependencia de los países de la Unión Europea. Sin embargo, desde ING IM aseguran que lo peor de la crisis ya ha pasado para la Europa emergente, por lo que ahora se trata de uno de los mercados con mayor potencial de revalorización tras el duro castigo recibido.

“Estos países han crecido mucho gracias al capital especulativo y los bancos han adoptado demasiado riesgo, una tarea que lleva años solucionar. Pero después de una crisis tienes que tomar riesgo y comprar los países que han caído más. Además están recibiendo fuertes flujos de capital y las divisas tienen un gran recorrido”, explica Maarten-Jan Bakkum, estratega de renta variable emergente global de ING IM. “Países como Hungría están haciendo los deberes, realizando reformas fiscales agresivas, y cuentan con el colchón de las ayudas que recibieron del FMI y el BM. Es la clásica turnaround story”, añade.

Otro de los mercados favoritos de este experto es el ruso, que cuenta con las valoraciones más atractivas del área BRIC y que además se beneficiará directamente del potencial alcista del gas y el petróleo. Sin embargo, en el largo plazo Bakkum no es positivo con la economía rusa, en el que aprecia varias trabas para el crecimiento como el problema demográfico y la falta de eficiencia.

En Latinoamérica, la estrella emergente es Brasil para quien la concesión de los Juegos Olímpicos de 2016 ha supuesto sin duda una gran noticia. Los bancos brasileños se encuentra además entre los más saneados del mundo, aunque precisamente por este motivo sus valoraciones son más caras. Por tanto, Bakkum prefiere apostar por los sectores de minería, energía, consumo e inmobiliarias en este mercado.

Materias primas al alza

En su conjunto, el experto afirma que los países emergentes se verán beneficiados tanto de la recuperación económica global y el retorno de los flujos de capital como del potencial de crecimiento de las materias primas. En este último aspecto, los mayores beneficiarios serían las economías exportadoras de commodities, como Rusia y Brasil, aunque para otros mercados como el turco, el coreano y el taiwanés supondría un encarecimiento de su factura comercial. No obstante, Turquía se encuentra también entre sus principales apuestas gracias a sus sólidos fundamentales de cara al largo plazo.

Bakkum considera que el crecimiento emergente podría subsistir aún cuando las economías desarrolladas tardasen en salir de la crisis. “La demanda de materias primas se ve fuertemente impulsada por China y este país podría seguir creciendo aunque la recuperación global fuera en forma de L, aunque dependería de cuan larga fuera la parte horizontal de la L”, comenta Bakkum. De hecho, China es otro de los mercados favoritos del experto de ING IM gracias a los crecientes flujos de capital extranjero y el potencial de apreciación del yuan.