“Este año la rentabilidad en high yield vendrá por el lado del cupón”

AXA
Foto cedida

Evitar caer en el ‘default’ es, sin lugar a dudas, la gran obsesión de los gestores de renta fija. Esto cobra especial relevancia en el mercado de deuda de alto rendimiento, donde por naturaleza el riesgo es mayor. Sin embargo, existen gestoras que se han convertido en auténticas especialistas en evitarlos.  Una de ellas es AXA Investment Managers, como demuestra en el US Short Duration High Yield. “Desde que en 2002 se lanzara el fondo, se han producido en el mercado 408 defaults, de los cuales sólo hemos caído en dos”, revela Carl Whitbeck, director de deuda de alto rendimiento estadounidense de AXA Investment Managers.

En una presentación celebrada en Madrid, el experto se mostraba convencido de que el mercado de alto rendimiento todavía supone una interesante oportunidad de inversión. En este sentido, Whitbeck calcula que la rentabilidad que ofrecerá este año el high yield será de entre el 6% y el 7%. “Aunque este porcentaje podría parecer mediocre en comparación con el cosechado por esta clase de activo en 2012, sigue siendo muy atractivo si se compara con el que se prevé ofrezcan otras clases de activos”, afirma. “Este año la rentabilidad en high yield vendrá por el lado del cupón. No esperamos más compresiones de los spreads”, asevera.

Asimismo, el experto estima que el ratio de ‘defaults’ se mantendrá en torno al 2%. “Esquivar las quiebras es la mejor estrategia en high yield. Eso es precisamente en lo que nos centramos”, señala el experto. En su opinión, la gestión activa mitiga el riesgo de ‘default’. “Consideramos que la clave para obtener una rentabilidad por encima del índice a largo plazo en el mercado de crédito de Estados Unidos es preservar el capital principal a través de un análisis fundamental centrado en la búsqueda de títulos de deuda de compañías que estén mejorando su calificación crediticia”, señala.

Para Whitbeck, “si tienes una visión clara del ciclo económico, tienes una visión nítida del nivel de impagos que debes esperar”. Tal y como explica, los ‘defaults’ van en función del ciclo. “Así, aumentan después de que éste haya alcanzado su pico. Aunque los programas de flexibilización monetaria puestos en marcha por la Reserva Federal han facilitado enormemente el acceso al crédito, muchas compañías no logran sobrevivir porque se les cierra el grifo del crédito”, señala. Por ente, a la hora de hacer la selección conviene ser muy cuidadoso y seguir un método tan riguroso como disciplinado.

La estrategia de inversión está claramente definida por la firma y se basa en la perfecta comprensión del entorno macroeconómico y de mercado. “Primero, hacemos un análisis fundamental de cada bono, identificando cuales son los riesgos macroeconómicos y microeconómicos que le pudiesen afectar. El segundo paso consiste en demostrar el valor relativo y absoluto del activo (calificación crediticia, industria a la que pertenece, curva de crédito…). Finalmente, se construye una cartera que permita generar una atractiva rentabilidad ajustada al riesgo, que es monitorizada constantemente”.

Whitbeck defiendo el buen funcionamiento de este sistema, al haber producido rentabilidades superiores al mercado en 2011, 2012 y el primer trimestre de este año. El US Short Duration High Yield, en el que la firma busca fundamentalmente generar una buena rentabilidad con una menor volatilidad, no es el único fondo en el que los expertos de la gestora, con base en Connecticut, testan esta estrategia. “Ofrecemos a nuestros clientes otros cinco productos de crédito que utilizan la misma metodología”. Estos son el US Core High Yield, el Global High Yield, el Negative Basis Trades, el US Investment Grade Credit y el Global Credit.

A su entender, el inversor se ha visto cada vez más atraído por el high yield debido al favorable comportamiento mostrado por esta clase de activo desde 2009. “El fuerte crecimiento experimentado ha hecho que el high yield estadounidense se haya ganado la confianza de los inversores. Esto seguirá viéndose apoyado por la política acomodaticia seguida por la Fed y por la mejor situación en la que se encuentran los balances de las empresas americanas”. El equipo gestiona 30.000 millones de dólares en high yield, de los cuales 22.000 corresponden a la estrategia Short Duration High Yield y 8.000 a la estrategia core high yield.