El Tesoro Público ha superado hoy sus expectativas de emisión de deuda y ha adjudicado 4.798,9 millones de euros en bonos y obligaciones a tres y diez años, tras recibir una demanda de 8.576,9 millones. En concreto, ha colocado 3.940,3 millones en bonos (frente a los 6.132,3 millones solicitados por los inversores) y 858,6 millones en obligaciones (donde ha habido una demanda de 2.444,6 millones).
El fuerte interés en los títulos a más largo plazo, en los que las peticiones han casi triplicado a las adjudicaciones, ha tenido un positivo reflejo en el precio. El Estado ha podido rebajar en un punto el tipo de interés y situarlo en el 5,7%, frente al 6,7% del pasado 2 de agosto. Entonces el BCE no había anunciado todavía su pretensión de comprar deuda y la prima de riesgo rondaba los 600 puntos básicos.
En los bonos a tres años, hubo una emisión reciente en septiembre (el día 6) y el efecto del BCE ya se había reflejado. Por eso, el tipo de interés se ha situado en el 3,9%, frente al 3,7% de hace dos semanas.
Según Antonio Castilla, socio director de CGA Patrimonios, la emisión de hoy ha mostrado una “sobredemanda considerable” y “ha mejorado casi un 14% con respecto a la emisión anterior”, lo que muestra una “buena sintonía para subastas futuras”. La causa principal de esta mejoría reside en “el anuncio de Mario Draghi y del BCE de compra de deuda a plazos cortos de uno y tres años”, ya que “el mercado está descontando como positivo cierta intervención de España”.