El sentimiento de los analistas se sitúa en su nivel más positivo en tres años

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Mattcameasarat, Flickr, Creative Commons

La confianza de los equipos directivos entre las empresas más grandes del mundo ha alcanzado su nivel más alto desde 2014, pasando de negativa el año pasado a positiva en 2017. Esta es la conclusión de la última Encuesta de Analistas de Fidelity International en la que se mide el sentimiento empresarial para los próximos 12 meses.

La compañía, se apalanca en su equipo de 200 analistas distribuidos por todo el mundo que realizan unas 17.000 reuniones al año con empresas y que cubren el 90% de la capitalización bursátil a nivel global.

El objetivo de la encuesta es “separar la realidad del ruido del último dato macro o la última noticia política”, señala Sebastián Velasco, director general de Fidelity para España y Portugal. Los empresarios muestran un mayor optimismo y muchos creen que la demanda será el catalizador del crecimiento de los beneficios de sus empresas. Al contrario de lo que a menudo se piensa, el estudio señala que la política no supone un freno tan fuerte para las decisiones empresariales. “Ello hace que la política siga siendo ruido y las empresas no cambien sus estrategias por los eventos electorales”, explica Domingo Barroso, miembro del equipo de ventas de la entidad. Incluso la política de EEUU se percibe como un factor moderadamente positivo para las empresas, con una excepción: el proteccionismo, que se percibe como un impacto negativo para China y los mercados emergentes.

Por el lado de los costes, aunque éstos aumentan por el incremento de la inflación, las empresas cuentan con poder de fijación de precios.

Aunque la mejora afecta a todas las regiones, el movimiento tiene especial vigor en Europa Oriental, Oriente Medio, África y Latinoamérica. Es decir, pese a que la encuesta fue realizada tras las elecciones de EEUU el pasado noviembre, hay una menor preocupación en tornos a los mercados emergentes derivada de la recuperación del precio de las materias primas, aunque siguen siendo las economías desarrolladas las que lideran el sentimiento de mercado.

¿Cómo va a afectar la innovación tecnológica? Los analistas aprecian un creciente grado de disrupción que sigue impulsando la confianza en el sector tecnológico, si bien los sectores de la vieja economía también salen reforzados en la presente encuesta, sobre todo la energía y los materiales. Sorprende, sin embargo, que las empresas de consumo discrecional, que suelen beneficiarse de las aceleraciones del ciclo, obtuvieron las peores puntuaciones en el indicador de sentimiento de este año.

En materia de riesgos, el estudio percibe como riesgos más importantes la posibilidad de que los precios del petróleo vuelvan a caer o que el crecimiento de la demanda decepcione. Otra amenaza sería una rápida subida de la inflación (principalmente en EE.UU. y Reino Unido), las amenazas proteccionistas y a las consecuencias del Brexit.