El reloj de la inversión de Fidelity señala un viraje hacia los activos de riesgo

Aunque el reloj de la inversión de Fidelity aún sigue en estagflación, la lectura de crecimiento se ha vuelto positiva gracias al respaldo de la expansiva política monetaria llevada a cavo por la Reserva Federal y el impulso de la confianza en los negocios. Como consecuencia, en Fidelity han adaptado su asignación de activos moviéndola hacia una sobreponderación de los activos de riesgo, mediante la compra de más materias primas en sus fondos multiactivos y reduciendo los bonos gubernamentales hasta infraponderarlos.

Aunque Trevor Greetham, director de asignación de activos de Fidelity, mantiene las posiciones infraponderadas en renta variable, también ha cambiado ligeramente su asignación en este activo de cara a febrero para afrontar este escenario más propicio para los activos de riesgo. Así, en la gestora han reducido ligeramente la infravaloración de la bolsa de la eurozona y la de Japón, añadiendo además peso en el sector inmobiliario, firmas industriales y tecnología en detrimento de áreas más defensivas. Con respecto a la liquidez, se mantiene neutral.

Con respecto a la situación macroeconómica, Greetham comenta que, mientras la inflación subyacente está bajo control, la subida de precios general ha empezado notarse debido al encarecimiento de las materias primas, sobre todo energéticas y alimenticias. “Si la tendencia continúa, las rentabilidades de los bonos gubernamentales también van a subir”, comenta el experto, trayendo consigo la consecuente caída de precios. Por eso cree que este escenario de continuación de la tendencia comenzada en el último trimestre de 2010 apoya el movimiento hacia los activos de mayor riesgo.

Y todo, en un contexto donde el crecimiento global se ha vuelto positivo por primera vez desde julio de 2010 y donde la caída de los indicadores económicos ha terminado, debido en parte a que la política monetaria aún no se ha endurecido. Además, la ratio de desempleo sigue cayendo de forma gradual en EEUU, según apunta Fidelity en su informe de febrero.

Oportunidad de compra

Greetham considera que la economía no se está moviendo hacia la reflación, como habían esperado, sino hacia el recalentamiento. Aunque en los próximos meses podría venir más estrés procedente de la zona euro, el experto cree que debería considerarse como una “oportunidad de compra”.

 

Fuente: Fidelity