“El potencial de crecimiento del mercado latinoamericano sigue siendo mayor a los desarrollados”

¿Mercados emergentes o desarrollados? Es una de las primeras preguntas a las que se están enfrentando los gerentes de inversiones de las administradoras chilenas. En Santander Asset Management, Luis Aliste se inclina por los primeros. “Creemos que los mercados emergentes han aumentado su atractivo en relación a los mercados desarrollados”, asevera. El gerente de inversiones reconoce que tienen en general una visión optimista para los mercados, pero la consideración anterior se debe a dos razones: por una parte recuerda que la valorización relativa favorece a los emergentes; en segundo lugar, “tenemos una visión positiva para el desempeño de la economía china por el resto del año, lo que da sustento al precio de algunos commodities y en general a los mundos emergentes”.

Dentro de la visión positiva para emergentes, “tácticamente con una perspectiva de mediano plazo, la región asiática ha ganado atractivo, muestra valorizaciones razonables junto a una perspectiva positiva de la mano de un buen segundo semestre de la economía china”, concreta Aliste. Respecto al sentimiento sobre China, considera que aunque la desaceleración de su economía ha sido un riesgo para el bloque emergente y especialmente Chile en los últimos tiempos, desde Pekín se ha impulsado un cambio en el modelo de crecimiento anticipando ajustes que de no haberse producido ahora, “se habrían postergado e incubado riesgos mayores en el futuro”. Así, Luis Aliste mira el vaso medio lleno: “El proceso en el que se encuentra China permite proyectar crecimientos que son menores en el corto plazo pero más sostenibles y sustentables en el largo plazo”.

Ya dentro de Latinoamérica, una vez que las economías latinoamericanas han enfrentado el ambiente post boom de commodities “muy desafiante” y que sigue ajustándose, en renta variable “el potencial de crecimiento respecto a las economías desarrolladas sigue siendo mayor y la tesis de inversión sigue siendo atractiva en el largo plazo”, arguye el gerente de inversiones de Santander Asset Management. “Si además consideramos el descuento en niveles históricos entre las valorizaciones relativas a los mercados desarrollados, el atractivo de Latam es aún mayor”

El optimismo para la región se resquebraja o, cuanto menos, tiene ciertas aberturas en la visión del mercado chileno. La bolsa local ha vivido rezagada en los últimos tiempos de los mercados emergentes, que de por sí quedaron rezagados en 2013 de los desarrollados. Ahora, la historia puede cambiar con las economías en desarrollo, pero los profesionales no tienen claro si la renta variable chilena conseguirá subirse a este carro. Aliste se muestra moderadamente optimista. “No creemos que la bolsa chilena siga una evolución tan rezagada a futuro, ya ha habido un ajuste muy fuerte de expectativas de los inversionistas locales, que han estado en una posición vendedora desde hace un largo periodo. La depreciación del peso, el estímulo monetario impulsado por el banco central y una eventual menor presión de costos laborales –como de energía al menos durante la mitad del año - podrían dar soporte al mercado local”. Aun así, avisa de que el proceso de reformas “seguirá provocando algo de incertidumbre”.

Para la inversión en Chile, mayor es el atractivo que ofrece la renta fija por su relación riesgo-retorno, señala Aliste, aunque cree que la mejor parte ya pasó. En adelante, “los retornos a mediano plazo debieran estar en línea con las tasas de interés que actualmente ofrecen, es decir, vemos poco espacio para ganancias de capital adicionales”.

Estados Unidos por delante

En el bloque de economías desarrolladas, el mercado estadounidense estaría por delante del europeo, mientras que Japón ofrece atractivo pero resultados esperados más dispersos, resume Luis Aliste. La economía norteamericana “ha estado recuperándose de forma más decidida estos últimos meses,  y es esperable que siga consolidando este mayor ritmo económico,  lo que constituye una muy buena noticia para el mundo. Sin embargo, en la medida que esto ocurra, las tasas americanas e internacionales aumentarían, con lo cual los activos de renta fija podrían verse presionados.  La velocidad y magnitud de este ajuste es el principal riesgo en el mediano plazo”.

Europa espere que quede rezagada frente a Estados Unidos, aunque esto “no es necesariamente negativo para el mercado europeo, en la medida que el bajo dinamismo asegura una mayor disposición del BCE a estimular monetariamente la economía”. En este escenario, “el bajo costo de financiamiento de las compañías o la eventual devaluación del euro, puede beneficiar a algunos sectores importantes de la bolsa”.

Para Japón, la dispersión proyectada en los resultados finales se refiere a que “el éxito o fracaso de las medidas que el gobierno y el banco central están actualmente impulsando es más incierto, como asimismo el resultado de la inversión en acciones japonesas. Actualmente, el gobierno ha logrado generar la voluntad política para seguir avanzando en reformas micro que dotan de mayor flexibilidad al mercado local, necesarias para que la economía gane competitividad”.