El mercado europeo ETF se beneficia de los cambios propuestos por ESMA

Nizam_Hamid
Foto cedida

Las recientes propuestas del ESMA, publicadas el 25 de julio de 2012, han sido fundamentales para aclarar muchas de las dudas planteadas por los clientes con respecto a la estructura de los ETF. Uno de los aspectos más importantes de las directrices es la amplia aceptación de que son productos UCITS y como tales quedan por tanto íntegramente sujetos a la amplia regulación en vigor. Por lo tanto, no hay necesidad de ser tan dramáticos ni de una regulación específica para los ETF.

De hecho, todos los cambios introducidos por ESMA serán aplicables a todas las UCITS. La novedad más importante, no esperada en general por el mercado, fue la regulación paneuropea del préstamo de valores y la directiva sobre el traspaso del 100% de los ingresos por préstamo de valores después de costes. Esta nueva norma formaliza un proceso antes sujeto a distintas regulaciones locales en términos de niveles y de requisitos de calidad del colateral.

No se han publicado normas específicas con respecto a los ETF sintéticos, reflejando el sólido marco legal existente. Tal circunstancia ha sido importante para tranquilizar a los clientes con respecto al riesgo estructural y a la idoneidad del producto. Un cambio menor, aunque importante, es el requisito de que todas las UCITS que sean ETF deberán incluir en su nombre “UCITS ETF”. Con esto, se pretende evitar cualquier confusión entre dichos ETF y otros productos cotizados en bolsas de valores tales como los ETC y los ETN.

Todas estas modificaciones positivas del marco regulatorio han coincidido con un extraordinario cambio en la percepción que los inversores tienen del riesgo de mercado, especialmente en la zona euro. Tal circunstancia determinó un incremento significativo de los volúmenes de operaciones de productos ETF y ETP en Europa. Así pues, en el mes de septiembre, el flujo de entrada mensual de activos netos alcanzó casi los 3.900 millones de euros, lo cual representa la mayor cifra mensual de entrada desde julio de 2011. En conjunto, en 2012, se han producido nuevos flujos de entrada en productos ETP en torno a 14.500 millones de euros, habiéndose recolectado dos tercios de esta cantidad durante los tres últimos meses a medida que los inversores iban mostrando confianza renovada en los ETF y ETP.

Además de estos fuertes flujos de entrada, se han producido, en general, movimientos positivos de mercado que han motivado que los activos gestionados en ETP alcancen una cifra récord de 267.000 millones de euros.

Renta variable europea

Uno de los destinos más importantes de los flujos de entrada ha sido el de la renta variable europea y de la zona euro, beneficiándose este segmento de mercado de unos flujos de entrada por importe de 3.600 millones durante los cuatro últimos meses. Esto ha supuesto un cambio drástico con respecto al resto del año, período en el que se habían producido flujos de salida por importe de 2.000 millones. Los inversores mostraron un especial interés por esta clase de activos, dadas las expectativas de resolución de la crisis de la zona euro.

En cierta medida, estas tendencias también han sido evidentes a nivel de país, de tal forma que los ETF de renta variable alemanes que habían experimentado previamente importantes flujos de entrada en 2011, registraron salidas superiores a los 1.500 millones durante el año en curso. Resulta interesante ver cómo los inversores han ido incrementando su exposición en países antes descartados tales como Italia, que registró el quinto mes consecutivo de flujos de entrada positivos, y España, que también experimentó modestos flujos de entrada.

Otro de los sectores clave para los clientes fue el mercado de renta fija, donde los flujos se han orientado hacia aquellos segmentos que ofrecían mayores rentabilidades en un contexto de tipos de interés bajos. El mayor beneficiario de esta tendencia ha sido el segmento de los bonos corporativos y aunque los flujos de entrada registrados en septiembre fueron modestos, cifrándose en 285 millones, han superado los 3.700 millones desde principios de año.

Esta tendencia también se repitió en el segmento de bonos de alta rentabilidad, experimentando su mejor dato mensual de flujos de entrada con más de 422 millones y unos flujos totales este año por importe de 1.300 millones. Ante este escenario, el mercado de deuda pública en euros registró flujos netos negativos durante el año anterior, reflejando las preocupaciones sobre este tipo de riesgo.

Dividendos

En el ámbito de la renta variable, la atención se centró también en los ETF de mayor rentabilidad y el tema de los dividendos atrajo casi 1.000 millones de nuevos activos durante el último año. Los inversores siguen centrados en los activos de mayor rentabilidad y, en cierta medida, esto se ha manifestado en los cambios recientes producidos hacia las exposiciones de valor.

Sin lugar a dudas, las materias primas y el acceso a los metales preciosos, especialmente el oro, han constituido una parte trascendental del mercado ETP. El mercado de las materias primas en general ha representado, con 5.200 millones, el mayor segmento receptor de flujos de entrada en el mercado europeo, representando un 32% del total de flujos de entrada. En septiembre, los flujos de entrada en productos del oro ascendieron a 1.300 millones, mientras que las materias primas diversificadas registraron flujos trimestrales constantes, situando los flujos totales de entrada en casi 500 millones.

Existen varios factores que explican este reciente repunte experimentado por el mercado ETF y ETP europeo, siendo el más importante desde una perspectiva de cliente, la claridad con respecto a la regulación. A medida que los inversores han ido teniendo garantías con respecto a la estructura y al marco regulador de los ETF, un entorno de mercado más positivo los ha animado a utilizar los ETF para las exposiciones de las carteras gestionadas y la distribución de activos. Los últimos flujos de entrada sugieren que el mercado ETF está preparado para registrar otro año con flujos netos de entrada de capitales y de crecimiento en términos de activos gestionados.