"El índice Case Shiller de precios de la vivienda “está registrando los mayores incrementos desde 1996"

Es uno de los grandes interrogantes clave para entender la recuperación económica del país y, por ende, las posibles decisiones con respecto al final del QE3 que pueda tomar Ben Bernanke, presidente de la Reserva Federal.

Según explica Trevor Greetham, responsable de fondos multiactivos en Fidelity, en la actualidad el índice Case Shiller de precios de la vivienda “está registrando los mayores incrementos desde 1996 por el descenso de los tipos hipotecarios y la mayor disposición del sector financiero a prestar”. La gestora americana considera en un informe sobre el sector que el real estate puede contribuir de tres maneras a robustecer la economía estadounidense. La primera y más importante, por ser la de mayor impacto directo, es la inversión residencial. “El volumen de promociones iniciadas está aumentando y la inversión residencial real en Estados Unidos. creció un 14,4%, el ritmo más rápido desde 1994”, explican.

La segunda vía es a través del “efecto riqueza en el consumo”, puramente psicológico: “Cuando los precios de la vivienda suben, los consumidores se sienten más ricos, lo que tiende a hacerles gastar más”, apuntan desde Fidelity. Al tiempo, aportan el siguiente cálculo: por cada dólar de incremento de la riqueza neta de los hogares, los consumidores estadounidenses han gastado históricamente entre 3 y 5 céntimos más. La tercera aportación es a través de la suscripción de segundas hipotecas. “Como se demostró en el periodo de auge, las subidas del precio de la vivienda permiten a los propietarios pedir más dinero prestado contra el valor de sus inmuebles. Las pruebas disponibles sugieren que la propensión a gastar ese dinero suele ser alta”, señalan desde la gestora.