El fenómeno Trump visto a través de los ETF

ETF
Investmentzen, Flickr, Creative Commons

Observar cómo se han movido los flujos hacia ETF en el mes en el que Donald Trump ha ganado las elecciones en Estados Unidos resulta un ejercicio muy interesante, ya que permite saber cuáles son los miedos y las expectativas de los inversores a la llegada a la Casa Blanca de una personalidad tan polémica como la que encarna el líder republicano. En este sentido, el resultado de las elecciones de Estados Unidos impulsó la inversión en ETF de renta variable estadounidense debido a las expectativas sobre las políticas favorables al crecimiento del presidente electo. Así lo muestra el informe sobre la industria ETP realizado por BlackRock correspondiente a noviembre 2016, que permite conocer incluso la evolución por sectores o segmentos de mercado concretos.

A este respecto, las entradas de flujos se centraron principalmente en productos cotizados que ofrecen exposición a empresas de gran capitalización, así como al sector financiero, que se beneficiaron del apuntamiento de la curva de rentabilidad y de las expectativas de una regulación  menos estricta durante el mandato de Trump. Los ETP centrados en los sectores farmacéutico, biotecnológico y de la salud también registraron entradas netas positivas. Asimismo, los productos cotizados de empresas de pequeña capitalización y de perfil value estadounidenses también salieron bien parados de esta situación al beneficiarse de las expectativas de una mayor inflación.

¿Y en renta fija?

Las entradas en la renta fija registraron una inversión de la tendencia con salidas de 3.300 millones tras 16 meses de entradas de capitales, según datos de Lyxor. Estas salidas de capitales afectaron principalmente a la deuda pública, tanto de países desarrollados como emergentes (-1.300 millones y -1.900 millones, respectivamente), al verse perjudicados por el cambio en las expectativas de los tipos de interés tras las elecciones en EE.UU. Los flujos en la deuda privada con calificación investment grade también se estabilizaron con 319 millones de salidas tras 9 meses de flujos positivos, y un promedio anual de 1.200 millones, reflejando probablemente las dudas de los inversores sobre la ampliación del QE.

De vuelta a los datos de BlackRock, donde más se dejó sentir el efecto Trump en renta fija fue en los emergentes y muy especialmente aquellos centrados en deuda pública y exposiciones a bonos soberanos, los cuales experimentaron salidas de capitales propiciadas por el discurso proteccionista de Trump y la apreciación del dólar. Los productos cotizados de bonos del Tesoro estadounidense también sufrieron salidas de capitales debido al retroceso de las rentabilidades provocado por la tendencia reflacionista, mientras que los ETF de bonos del Tesoro estadounidense protegidos frente a la inflación (TIPS) registraron una inversión positiva en previsión de la continuidad de las presiones inflacionistas.