Aunque no es un fondo de inversión socialmente responsable (ISR) como tal, Bankinter Gestión de Activos se ha propuesto con su renovado fondo Bankinter Eficiencia Energética y Medioambiente aportar su pequeño grano de arena al cuidado del entorno, mediante inversiones que, de facto, cumplen con el primero de los criterios ASG, el ambiental.
El Bk Eficiencia Energética y Medioambiente procede de la reciente reconversión del Bk Sector Energía, de acuerdo a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El fondo precedente ya asumía algunas de las pretensiones actuales, pero con la modificación de su política de inversión y denominación el nuevo vehículo ensancha sus miras medioambientales.
Según su folleto, el Bk Eficiencia Energética y Medioambiente -que tomará como referencia los índices S&P 500 (en un 25%) y Stoxx Europe 600 Price (al 75%) y tendrá unas comisiones del 1,6% por gestión y del 0,15% por depósito- invertirá más de tres cuartas partes de su patrimonio en renta variable desarrollada y europea de empresas relacionadas con la mejora de la eficiencia en el uso de la energía y del transporte, el almacenamiento de la electricidad, la automatización y mejora de la productividad industrial, la reducción del impacto ambiental del uso de combustibles fósiles, las energías renovables y la gestión de agua y residuos.
En su anterior etapa, su universo de inversión comprendía compañías cuya actividad estuviera relacionada con los sectores de energía, materias primas y el uso eficiente de los recursos naturales o la energía. Aunque su patrimonio era pequeño, inferior a los ocho millones de euros, sus rentabilidades sí eran notables: un 5,7% anualizado a cinco años, un 4,7% a tres años y un 5,7% a un año, según Morningstar.