El caso de inversión de las small caps emergentes, explicado por Mark Mobius

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Nuno Coimbra

El Templeton Emerging Markets Smaller Companies es uno de los fondos de Franklin Templeton Investments que ostentan la calificación de Consistentes. El fondo, al cargo de Mark Mobius, sólo ha terminado con rentabilidad negativa un año desde 2009; en 2016 presenta una rentabilidad del 2,4% hasta el 31 de julio (datos de Morningstar). En un mundo en el que los inversores están siendo obligados a asumir más riesgo para obtener los retornos del pasado, Mobius llama la atención sobre la clase de activo en la que invierte este producto: “Creemos que las small caps emergentes ofrecen un potencial de crecimiento fuerte y continuado y valoraciones atractivas. También vemos a la clase de activo como una de las más subestimadas por los inversores, en parte debido a concepciones erróneas en relación con la volatilidad, la liquidez y la escala de nuestro universo”

Algunos errores de concepción

El gurú de los emergentes afirma que esta clase de activo ostenta una serie de atributos clave estructurales y tácticos que justifican “la inclusión de la clase de activo en una exposición a emergentes”. En la parte estructural, indica en primer lugar que el universo es muy amplio, pero la presencia de inversores extranjeros es baja y la cobertura de las casas de análisis es escasa: las small caps representan sólo el 3% del MSCI Emerging Markets, aunque aportan el 28% de la capitalización del universo emergente, situación que se traduce en una infraponderación estructural en esta clase de activo.

En la parte táctica, el gestor indica que “la reciente corrección de los emergentes ha proporcionado una oportunidad de valoración particularmente atractiva”. También es importante tener en cuenta la baja correlación entre small caps y big caps. Esto se explica porque, por un lado, numerosas grandes capitalizadas de países emergentes han ido expandiendo su negocio más allá de las fronteras de su país, convirtiéndose en multinacionales que obtienen una porción significativa de sus ingresos en mercados desarrollados. “Por consiguiente, las cotizaciones de muchas de esas acciones ya no están guiadas primordialmente por factores locales”, comenta el gestor.

Éste indica que se pueden encontrar ejemplos de esta transformación en sectores como la electrónica, la industria automovilística o el consumo, donde en muchos casos los países desarrollados son su principal fuente de ingresos. En cambio, las small caps emergentes presentan un sesgo decididamente local, y su potencial de crecimiento está marcado por la demanda doméstica, un perfil demográfico favorable e iniciativas reformistas y les permite lanzar productos innovadores de nicho.

 “Las small caps emergentes están lejos de ser un nicho de inversión, a pesar de las percepciones generales”, declara Mobius. Éste recuerda que el universo está compuesto por más de 23.000 compañías, con una capitalización agregada cercana a los 5 billones de dólares y un volumen diario de alrededor de 60.000 millones, “constituyendo proporciones sustanciales de toda la liquidez y capitalización del mercado emergente”.

La liquidez suele ser el objeto de mayor controversia entre inversores: “Las small caps emergentes típicamente pertenecen de forma desproporcionada a inversores retail locales que suelen negociar con más frecuencia que los institucionales extranjeros, debido a que los primeros generalmente tienen un horizonte de inversión mucho más corto, y como resultado impulsan la liquidez”, detalla Mobius.

¿Hora de replantear la exposición a emergentes?

“El MSCI Emerging Markets está desproporcionadamente dominado por la exposición al sector financiero, energía, tecnología de la información, telecos y utilities. Estos sectores típicamente se ven más impactados por tendencias macro globales o a nivel país, ya sea la deuda asociada a un mercado inmobiliario, el precio del petróleo o políticas gubernamentales”, denuncia Mobius. Éste resalta asimismo la gran presencia de compañías estatales entre los grandes valores: “Aunque encontramos que muchas de estas compañías están bien gestionadas, los intereses de sus propietarios no siempre están enteramente alineados con los de los inversores minoritarios”.

En cambio, continúa el experto, una exposición a small caps emergentes permite participar en los sectores de mayor crecimiento, como el de consumo discrecional o el farmacéutico, donde las compañías -además de presentar sesgo local- suelen tener una posición dominante en industrias de pequeño tamaño. “Las compañías pequeñas con más éxito utilizarán esa fuerza local para expandirse internacionalmente, lo que apoyará su transición a medianas o incluso grandes capitalizadas con el paso del tiempo”, añade Mobius.

Potencial de crecimiento

“Los mercados emergentes representan un punto positivo en un panorama económico mundial incierto”, afirma el experto. Frente a las rebajas constantes de la previsión de crecimiento del FMI – la última de abril de este año, hasta el 3,2%-, el gestor contrapone la posibilidad de participar en algunas de las economías de crecimiento más rápido vía small caps, que también presentan altas tasas de crecimiento. “Es importante reiterar que este crecimiento es típicamente orgánico y se genera a partir de dinámicas del mercado local, en vez de estar guiado por factores macro o de ingeniería financiera a través de recompra de acciones, como se ha aplicado agresivamente en EE.UU. en particular y en los mercados desarrollados en general”, declara Mobius.

Las otras razones al margen de la macro que alimentan el atractivo de los pequeños valores, a ojos del experto, son el potencial de crecimiento derivado de ser incluidas en índices (y por tanto, al ser incluidas en ETF), así como su potencial para ser adquiridas por otras compañías más grandes.

Mobius no elude hablar de los desafíos que presenta esta clase de activos: “Quizá lo que es más importante de reconocer es que hay numerosas small caps emergentes que seguirán siendo pequeñas, debido a temas relacionados con el gobierno corporativo, por la baja calidad de su equipo directivo, falta de crecimiento en el mercado u otros factores. Los inversores deben determinar cuáles de esas compañías triunfarán en el largo plazo”. Sin embargo, teniendo en cuenta lo vasto del universo y la alta ineficiencia del mercado, el gestor concluye que “el caso de inversión en small caps emergentes parece convincente, dado nuestro enfoque bottom up sobre los fundamentales”.