El 56% de los institucionales ha incrementado su apetito por el riesgo en los últimos tres meses

Pese al espectacular rally de los mercados desarrollados en los últimos meses, los inversores no parece que vayan a perder las ganas de seguir comprando. Así lo revela la última encuesta sobre rotación de riesgo de ING IM: más de la mitad de los inversores institucionales (un 56% concretamente) han incrementado su apetito por el riesgo en el último trimestre, frente al 11% que lo ha visto reducido. Esta última cifra va en descenso, pues el porcentaje de inversores que habían disminuido su exposición a activos de riesgo en el anterior trimestre fue del 18%, según la encuesta.

Por categorías, la más popular ha sido la renta variable: hasta un 73% de los institucionales han afirmado que es su clase de activo favorito, frente al 64% que así lo confirmaban en el anterior trimestre. En segundo lugar figura el inmobiliario con un 45%, frente al 34% del trimestre anterior. El responsable de estrategia multiactivo de ING IM, Valentijn van Nieuwenhuijzen, considera que el incremento del apetito por el riesgo “es definitivamente un signo prometedor a medida que nos adentramos en 2014”. “Con más de la mitad de encuestados afirmando que su apetito se ha incrementado durante los últimos seis meses, esto indica que los inversores se sienten más positivos con respecto a la economía global”, añade.

Otro dato que resalta de este sondeo es la gran confianza que han depositado los institucionales sobre Japón: un 60% de participantes cree que las Abenomics conseguirán romper el círculo vicioso de la deflación en Japón, frente al 37% anterior. Sólo un 5% de encuestados creen que la política de las tres flechas no vaya a funcionar (un 16% en la encuesta anterior).

En materia de riesgos, sin mucho margen para la sorpresa aparece en las primeras posiciones la retirada del QE3 y una potencial subida de los tipos de interés: así lo ha expresado 1 de cada 5 encuestados (19%). Sin embargo, la crisis de la eurozona no ha hecho mutis por el foro, puesto que sigue en la mente de un 37% de inversores como una preocupación. Eso sí, la proporción ha caído porque la anterior encuesta reflejaba que era un 54% de participantes los que seguían preocupados por la crisis de la deuda soberana.

Van Nieuwenhuijzen constata que estos datos evidencian que se está viendo la recuperación global más sincronizada desde 2009. “Más notable que el nivel de optimismo es el grado de consenso que parece haber emergido simultáneamente entre los participantes de mercado. Con un crecimiento más fuerte y menos riesgos de shock en el horizonte, muchos están de acuerdo en que la renta variable es el activo más atractivo, con Europa y Japón apareciendo como las regiones preferidas en 2014”, concluye.