Dólar canadiense: infravalorado, en la sombra del gigante estadounidense

Gracias a un sector financiero sano y finanzas públicas controladas (el superávit presupuestario observado hasta el año 2008 ha permitido al gobierno aumentar considerablemente los gastos públicos), la economía canadiense ha logrado salir relativamente indemne de las dificultadas que han agitado los mercados financieros en 2008 y 2009.

Si a lo anterior sumamos la producción de materias primas, a la que está indexada en parte su moneda, se entiende mejor por qué el dólar canadiense se ha apreciado continuamente en valor nominal desde el año 2000. Sin embargo, esta moneda no está sobrevalorada: una vez restado el diferencial de inflación que favorece a Canadá, se observa que el dólar canadiense ha permanecido estable con respecto a su homólogo verde, creando así un margen de apreciación considerable dado el estado deteriorado de la economía estadounidense. Esta tendencia se confirma por la débil valoración del dólar canadiense con respecto a las otras divisas refugio como el franco suizo, o incluso las divisas indexadas a materias primas, como el dólar australiano.

El endeudamiento público descontrolado al que se están enfrentando actualmente los Estados Unidos le está dando más esplendor a la hoja de arce, reforzando su potencial como valor refugio. Canadá forma parte de los mejores alumnos según las agencias de calificación crediticia, con un déficit público previsto en 2011 del 4% del PIB y una deuda pública orientada a la baja que representa actualmente el 84% del PIB. El ciclo económico canadiense claramente adelantado con respecto al de su vecino complementa esta política de sana financiación pública.

El PIB canadiense sigue consolidando sus ganancias más rápidamente que los Estados Unidos ya que, para el segundo semestre de 2011, Canadá espera un crecimiento del 2.2% frente a un 1.6% para su vecino durante el mismo periodo. A raíz de esto, el banco central canadiense ha aumentado tres veces sus tipos de interés desde mediados de 2010 y debería seguir haciéndolo en los próximos meses. Exane Derivatives prevé un aumento de los tipos de interés de 100 puntos de base durante los próximos 12 meses, lo que debería seguir acentuando la diferencia de tipos entre los dos países en favor de la moneda canadiense. Ante estas condiciones, no es sorprendente que los inversores perciban cada vez más al mercado de renta fija canadiense como una alternativa posible al mercado estadounidense en términos de diversificación, no obstante su menor tamaño.

La única debilidad que no puede ignorarse en este cuadro tan favorable es el hecho de que la economía canadiense sigue siendo muy dependiente de la economía estadounidense. A pesar de los esfuerzos para diversificar los destinos de exportación orientándose hacia Asia, gran consumidora de materias primas, los Estados Unidos representan todavía más del 70% de las exportaciones canadienses. Por el contrario, una disminución de los temores de recesión de la economía estadounidense representaría un catalizador adicional de la apreciación del dólar canadiense. 

A fin de cuentas, el dólar canadiense sobresale en el contexto de desconfianza económica actual como una diversificación posible con respecto a su gigante vecino. En el pasado, el país ha logrado superar una crisis de endeudamiento público y ha conseguido excedentes presupuestarios a lo largo de la última década. Ha sabido resistir a la crisis y la indexación de su moneda a la cotización de las materias primas es muy favorable. En fin, aunque Canadá no esté totalmente a salvo de una posible recesión estadounidense, los resultados del gobierno y de los hogares canadienses siguen siendo muy positivos con respecto a los de su vecino, lo que representa una situación ideal para un país del G8 en un contexto en el que la mayoría de los otros miembros afrontan dificultades para reactivar su economía y se encuentran atrapados en problemas de déficit.