Decálogo del buen gestor

La agencia de valores Gestiohna, de grupo HNA, presenta el Decálogo del buen gestor, que resume en diez puntos las claves para ayudar a las empresas a mejorar la gestión priorizando los aspectos más relevantes.

1. Consigue información estratégica.

Contar con una buena información contable y extracontable en la que también se detallen aspectos como el calendario de pagos a proveedores y, la antigu?edad de la deuda de clientes, así como realizar un seguimiento de la evolución de los saldos, nos ayudará a conseguir plazos más cortos y a implementar estrategias más ágiles y dinámicas ligadas a la gestión del circulante (descuentos por pronto pago, renegociación o flexibilización de determinadas condiciones, etc.)

2. Planifica

Elaborar un análisis de la liquidez, o de las previsiones de cashflow, por ejemplo, son elementos que nos permitirán reaccionar a tiempo ante los

acontecimientos que puedan ir sucediendo. La previsión no puede quedar relegada a un segundo plano, en pro de lo que se conoce como “apagar fuegos”.

3. Sé realista y márcate una estrategia

Un buen gestor debe ser capaz de adecuar las estrategias y ajustar el presupuesto de su compañía a la coyuntura económica actual, en la que los resultados se leen en clave de gastos, no de ingresos, como sucedía años atrás.

4. Busca aliados externos a la compañía

Es recomendable buscar asesores financieros y otros expertos independientes que pueden realizar un análisis objetivo de la situación financiera, fiscal, etc. de la compañía En situaciones internas complicadas puede ocurrir que el gestor de la compañía pierda la perspectiva y tome decisiones en base a una visión totalmente subjetiva.

5. Gestiona a largo plazo

En momentos económicos turbulentos, es básico ser firme y constante en la gestión y las decisiones. Si decidimos invertir y asumir riesgos, debemos ser pacientes y mantener la calma, aunque el mercado en el que hayamos invertido caiga y no nos dé tiempo a reaccionar. Nuestro objetivo debe

ser la rentabilidad a largo plazo.

6. Diversifica… y controlarás el riesgo

Sé fiel a la máxima de “no meter todos los huevos en la misma cesta”, eso es, no concentrar los riesgos en un solo cliente, ya que si éste no paga puede hundir nuestra cuenta de resultados.

7. Compara las distintas alternativas

Antes de tomar una decisión, es recomendable tener sobre la mesa varias opciones que nos proporcionen una visión más amplia y nos permitan comparar.

8. Rodéate de los mejores

El gestor tiene que tener la perspectiva más global del negocio; mientras que el equipo debe complementarlo y estar preparado para acometer el trabajo y profundizar en el detalle.

9. Sé flexible y busca alternativas

La sofisticación creciente de las finanzas y de la economía en general hacen que un buen gestor sea aquel que es capaz de adaptarse y dar solución a las situaciones adversas, como un impago, falta de financiación en un momento clave, etc. Es en estos momentos cuando un buen

gestor saca su creatividad para encontrar fórmulas alternativas.

10. Hazlo con ilusión

Gestionar en tiempos de bonanza, cuando cualquier iniciativa se traduce en resultados inminentes, resulta más gratificante. Sin embargo, en momentos como el actual donde hay que tomar decisiones drásticas, es fundamental mantener la ilusión en el día a día y una actitud motivadora para el resto, que se traduce a menudo en mejores resultados para la empresa.