Conviene la renta fija de Latam

Según Gonzalo Rengifo, director general de Pictet Funds en Iberia y Latam, los niveles de deuda de familias, empresas y gobiernos emergentes es muy baja y estos países cuentan con recorrido para llevar a cabo medidas de política monetaria y fiscal destinadas a mantener el crecimiento. En este artículo explica por qué conviene invertir en renta fija de países emergentes, especialmente en moneda local en Latino América. Pictet cuenta con el fondo Pictet Latin American Local Currency Debt, que ha aumentado su patrimonio gestionado a 372 millones de dólares a diciembre de 2010 desde 114 de finales de 2009.

2010 se ha visto dominado por noticias macro económicas y 2011 se puede calificar de reto y oportunidades, donde seguirá el riesgo de deuda soberana. En cualquier caso tanto emergentes y desarrollados muestran claramente dos velocidades.

Es previsible una clara desaceleración económica en Europa y un crecimiento razonable, aunque no tanto como deseado, en EEUU.

Los crecimientos en regiones emergentes pueden ser del 5% en 2011, con niveles de deuda de familias, empresas y gobiernos muy baja, incluso en algunos gobiernos prácticamente inexistentes, sólo del 9-10% sobre PIB, como Rusia o Chile. Ello implica muy amplio recorrido para llevar a cabo medidas de política monetaria y fiscal destinadas a mantener el crecimiento. Además en estas regiones las ventas al por menor y créditos al consumo crecen por encima del 10%, niveles a los que no estamos acostumbrados en Europa. De hecho entre países emergentes se ha iniciado un ciclo de expansión de crédito, mientras que entre los países desarrollados se está llegando al final del mismo. Aunque los grandes motores de China y Brasil han empezado a tratar de contener la inflación y hay que ver si son capaces, su situación de partida es más razonable y saludable que en países desarrollados.

Conviene la renta fija de países emergentes poco endeudados, con cupones del cinco al ocho por ciento, atractivos respecto a la renta fija local, especialmente en moneda local en Latinoamérica. A ello se añade que las divisas emergentes tienen tendencia estructural a revalorizarse, reflejando la fortaleza de estas economías. También es el caso de las divisas ligadas a materias primas. De hecho estas divisas gestionadas activamente pueden ser fuente de rentabilidad adicional. En renta fija emergente en moneda local el cupón y la revalorización del bono pueden proporcionar un siete por ciento de rentabilidad media y la revalorización de divisas un tres por ciento adicional.

Simon Lue-Fong, gestor de Pictet Latin American Local Currency Debt, considera que América Latina y los países emergentes en general van a proporcionar el principal motor del crecimiento global los próximos años. A corto plazo puede haber episodios de volatilidad debido a preocupaciones sobre economías periféricas europeas, deuda del tesoro de EE.UU., endurecimiento en China y el creciente fantasma de la inflación en emergentes. En este sentido conviene seguir de cerca elementos técnicos y de riesgo global. Los períodos de volatilidad pueden proporcionar niveles de entrada interesantes en determinadas divisas y bonos.

En cualquier caso los flujos de capital deben seguir siendo el principal impulsor y beneficiar a las monedas de América Latina. La demanda neta continuará a medio y largo plazo. De hecho, a pesar de la preocupación, las intervenciones en los mercados de divisas o aumento de controles de capital son medidas inútiles a medio plazo.

Amancio Pérez, director comercial para Portugal y Brasil observa que los inversores internacionales están buscando rentabilidad, especialmente los institucionales y hoy en día la mayoría está considerando la inversión estructural en deuda local emergente, donde aún tienen bajo peso. Un primer paso ha sido invertir a nivel mundial y comienzan a expresar interés regional, donde Latam proporciona mayor cupón con riesgo de tipos de interés limitado y político razonable en Chile, Brasil, Colombia, Perú y México. En este sentido los fondos de deuda en moneda local de América Latina pueden utilizarse en la asignación estratégica a deuda emergente, con diversificación global, pues su correlación es baja con otras clases de activos.

Estima que el fuerte crecimiento económico de América Latina es buen ejemplo de capacidad para mantener el impulso a pesar de la desaceleración mundial. Sus bancos centrales han adoptado un estilo de política monetaria ortodoxa, centrándose en metas de inflación. Además, aunque la producción industrial puede haber alcanzado un pico, la demanda interna está proporcionando un colchón.

El país más desarrollado es Chile, seguido de México, Brasil, Colombia y Perú. Está mejorando la eficiencia de sus mercados locales -sus fondos de pensiones locales proporcionan liquidez, especialmente cuando los inversores extranjeros reducen posiciones-. Especialmente en Brasil hay fuerte crecimiento de PIB gracias a un floreciente mercado de trabajo -el desempleo está a niveles históricamente bajos-. Además en Brasil están mejorando las condiciones de crédito, con aumento de préstamos, mientras el optimismo de los consumidores ha llegado a niveles récord.