Economía estable, pero dependiente de sus vecinos. Así resumen el escenario económico y financiero de Canadá los economistas de Compass Group. A nivel bursátil, “las acciones se acercan a sus máximos históricos, pero aún presentan un rezago importante respecto de sus pares”, explican, debido en gran parte a la exposición a materias primas. Sin embargo, estos condimentos permiten que la renta variable canadiense sea una atractiva oportunidad. “Las valorizaciones son atractivas en términos absolutos a 12 meses, bajo su promedio histórico y bajo el promedio relativo a sus pares”.
En este sentido, las recomendaciones de mercado “muestran que aún hay valor”, recuerdan en Compass. Sin embargo, advierten, “indicadores técnicos muestran sobrecompra, lo que podría corregir en el corto plazo”.
El underperformance al que alude Compass empieza a recular. Hay tres razones para los analistas de la entidad chilena que explican el desempeño reciente de las compañías cotizadas canadienses. En primer lugar, la mejora en el sentimiento del mercado respecto a los commodities ha ayudado. También las perspectivas para la economía estadounidense y, por último, “la política monetaria expansiva. A lo anterior se suma el impulso que podría dar un aumento en los precios del petróleo por la tensión en Irak”. Asimismo, el análisis técnico desprende que “se ve sobrecomprado de corto plazo, por lo que podría corregir. Sin embargo, sus valorizaciones aún son atractivas para una posición de largo plazo”.
Como empieza el análisis de Compass, Canadá es estable, pero tiene el hándicap de la dependencia de la economía estadounidense. “Canadá es reconocido por su calidad de vida e instituciones sólidas, lo que se refleja en una serie de rankings internacionales. Es una de las pocas economías cuya deuda tiene clasificación AAA”, indican.
El 75% de las exportaciones canadienses tienen como destino el país vecino del Sur. Un cuarto de ellas, lo que equivale a casi el 19% del total, corresponde a energía. “Canadá tiene importantes reservas de Shale Gas/Oil, pero el desarrollo de la industria en Estados Unidos llevará prácticamente a 0 las exportaciones de energía hacia ese país, lo que podría ser compensado con envíos a otros mercados (Europa y Japón)”.
En cuanto al crecimiento económico de Canadá, la coyuntura “señala un crecimiento estable en torno al 2%”, aunque la tasa de desempleo, que está situada en el 7%, “sigue siendo una variable que inquieta al Banco de Canadá, que ha mantenido la tasa de interés en el 1%, con la inflación en el 2%, junto en el centro del rango meta (1% - 3%). Los indicadores líderes se encuentran en terreno expansivo (PMI sobre 50 puntos) y podría ver un impulso adicional ante un mayor dinamismo de la economía estadounidense”.