Cinco razones para seguir apostando por la apreciación del dólar en 2015

DOLAR
Gamma Man, Flickr, Creative Commons

El debate sobre si el dólar estadounidense continuará apreciándose con respecto a las principales divisas del mundo sigue abierto. Frente a aquellos que opinan que el 'billete verde' agotó su potencial alcista en 2014, Dirk Aufderheide, estratega jefe en divisas en Deutsche AWM, ofrece cinco razones para seguir apostando por la divisa.

1. La situación macroeconómica

Para Aufderheide, la situación macroeconómica respalda la devaluación del euro frente al dólar: “Los datos económicos mejoran en Estados Unidos y la inflación se mantiene cerca del objetivo del 2%, mientras la eurozona registra una baja inflación y un desempleo muy alto, que supera el 11%, y no parece que la situación vaya a cambiar a corto o medio plazo”.

2. Tipos de interés negativos y rentabilidades negativas

El segundo factor que destaca el experto es el hecho de que los bancos comerciales de la eurozona estén aplicando tipos de interés negativos sobre los depósitos de sus clientes −después de que el BCE decidiese llevar hace unos meses la tasa de depósito a territorio negativo− y que los títulos de deuda soberana y los depósitos que generan rentabilidades negativas superen el billón de euros, una cantidad que podría aumentar aún más si finalmente el BCE aprobase la compra de deuda soberana.

“Esta situación no resulta problemática para los inversores que se comparan con un índice”, apunta Aufderheide, “pero los inversores con objetivo de rentabilidad absoluta y los bancos centrales encargados de preservar el capital no pueden aceptar los tipos de interés negativos”. ¿La consecuencia? “Los inversores rotarán parte del capital hacia otros activos, aumentarán duración o incrementarán el riesgo de crédito”.

3. Las salidas de capital

De hecho, la eurozona ya está registrando fuertes salidas de capital hacia otros mercados AAA, como Estados Unidos o el Reino Unido, reforzando la depreciación de la moneda única a medio y largo plazo, sobre todo con respecto al dólar. En opinión de Aufderheide, “el programa de expansión cuantitativa del BCE podría acelerar la salida de flujos de la eurozona hacia otras regiones donde la deuda soberana genere rendimientos positivos”.

4. El riesgo político

A lo mencionado anteriormente, hay que sumar el riesgo político que entraña un 2015 en el que varios países de la eurozona (Grecia, España y Portugal) celebrarán elecciones generales que podrían reforzar la posición de los partidos euroescépticos y contrarios a las medidas de austeridad, y el conflicto entre Rusia y Ucrania, que aún no se ha resuelto definitivamente.

5. El dólar sigue siendo la moneda de reserva mundial

“Estados Unidos es la primera economía mundial, el mercado de bonos más grande del mundo y desempeña un papel crucial para la liquidez. Estoy convencido de que el dólar continuará siendo la moneda de reserva durante los dos o tres próximos años”, afirma el experto.

Aufderheide opina que el 'billete verde' también se apreciará frente al yen japónes, dadas las agresivas medidas expansivas puestas en marcha por el Banco de Japón, pero tiene sus dudas con respecto al renminbi, que podría estabilizarse con respecto al dólar en los próximos 6-9 meses. “El renminbi fue la única divisa capaz de resistir la apreciación del dólar en el verano de 2014”, explica. “El gobierno chino está comprometido con la apertura de su economía y sus mercados financieros, lo que allanaría el camino para que el yuan sea totalmente convertible y acabe convirtiéndose en moneda de reserva. En ese momento, presenciaremos un reequilibrio de las reservas mundiales que resultará negativo para el euro y, en menor medida, para el dólar”.

¿Y qué pasa con el euro?

Como recuerda el experto, desde el abandono del patrón oro en 1973 la depreciación de una moneda forma parte de un proceso normal de reajuste de los desequilibrios. “La debilidad del euro es parte del necesario proceso de ajuste para volver a generar inflación y crecimiento. Por eso creo firmemente que el euro, junto con el renminbi a medio plazo, seguirá siendo la principal moneda de reserva alternativa al dólar”, concluye.