Cinco mitos (falsos) sobre el mercado de bonos asiático

A la hora de invertir en deuda, se tiende a incluír a los mercados asiáticos bajo la categoría de emergentes pero, según afirma Rajeer De Mello, gestor Western Asset, una de las gestoras de Legg Mason, esto es un error que provoca que muchos inversores se pierdan una gran oportunidad de inversión. Según este experto, que es responsable de las operaciones de Singapur de la entidad, antes de entrar en esta categoría es necesario replantearse ciertos mitos que, si bien han podido ser válidos hasta ahora, ya no lo son.

Mito 1: los bonos asiáticos son una clase de activos marginal. Según Rajeer De Mello, si bien esta afirmación era cierta hace unos años, ya no lo es. Los bonos asiátiocos son el cuarto mayor mercado de bonos del mundo, pero los índices globales tienen poca exposición a Asia por lo que si se sigue a los índices, el inversor se pierde gran parte del mercado. Esta escasa exposición está motivada, según el experto de Legg Mason, a que muchos países de esta zona han emitido, históricamente, poca deuda y otros, como es el caso de Corea, ponen trabas a la compra de deuda por parte de inversores extranjeros. El experto de Legg Mason tampoco cree que sea un subsector dentro del mundo de los mercados emergentes puesto que recuerda que la mayoría de los países de la zona son desarrollados.

Mito 2: los bonos asiáticos son arriesgados. Esto tampoco es así puesto que la gran mayoría de los países de la zona tienen rating de alta calidad según S&P. Los únicos dos países en los que no es así son Indonesia y Filipinas, ambos calificados como BB+ y estos países tan sólo representan el 14% del universo. "Existe una gran posibilidad de inversión de alta calidad y el universo ofrece una buena mezcla de bonos donde elegir", apunta De Mello.

Mito 3: los bonos asiáticos son ilíquidos. Igual que en el primer mito, De Mello asegura que esta afirmación ya no es válida. Los mercados locales asiáticos de bonos han aumentado desde 2004 a tasas elevadas, como el caso de China, con incrementos anualizados en ese periodo del 33% o Vietnam con el 29% de crecimiento. Además, según el experto, los bancos centrales de estos países también han aumentado en la última década sus reservas.

Mito 4: los bonos asiáticos son homogéneos. "Es un pensamiento tentador pero si separas cada mercado se perciben grandes diferencias en términos de rentabilidad y volatilidad", afirma De Mello.

Mito 5: los bonos asiáticos se mueven por sus divisas. En todos los mercados de la zona tanto la divisa como la rentabilidad del bono han influído en esta clase de activo.

En definitiva, en palabras de De Mello "los bonos asiáticos son muy distintos a los de los mercados emergentes. Si piensas que son iguales, piénsatelo de nuevo".