Ciertamente no “soft patch”

No deja de sorprenderme cómo todavía abundan tantos analistas, gestores y economistas al lado de aquellos que piensan que lo que estamos viviendo es solo un “soft patch” de la economía. Ciertamente ni es soft ni es patch. No es suave porque hemos pasado de crecer en Estados Unidos y los países europeos llamados “core” dentro de unas tasas bastante en línea con las de una fase de recuperación normal al estancamiento más absoluto. ¿No les parece que un 0,4% anualizado en Estados Unidos o que un 0,1% en el “motor” alemán es lo más cerca a cero que uno puede llegar? Tampoco es bache porque no sólo hemos registrado ya dos trimestres en esta línea sino que los indicadores nos están diciendo claramente que tanto el tercer como el cuarto trimestre van a ser muy muy pobres.

 

Así, el bache en realidad es al menos una desaceleración cíclica persistente cuando no el preludio de una nueva recesión. De hecho, cuando todos los indicadores adelantados (para los diferentes aspectos de la economía) apuntan en la misma dirección (hacia abajo) y se extienden de manera global (no hay sitio donde refugiarse) la probabilidad de escapar a una nueva contracción económica en los países desarrollados es muy baja. En realidad, la cuestión posiblemente sólo es el cuándo. ¿Es ya o dentro de unos cuantos trimestres?

 

Aquellos que aducen argumentos tan válidos como que no tenemos curva de tipos invertida (uno de los indicadores adelantados históricamente más fiables para anticipar recesiones) sino con una pendiente considerable todavía o que el sector corporativo muestra unos saludables balances (grandes cochones de caja) debieran notar que no son condición necesaria para evitar una recesión. Si acaso pueden valer para atemperarla y que esta sea una recesión relativamente suave… claro está sino tenemos otro momento “Lehman”!

 

Para determinar el cuándo las próximas semanas van a ser claves. Indicadores de producción industrial y empleo en Estados Unidos o los PMIs manufactureros y de servicios a ambos lados del atlántico en sentido negativo serán decisivos. También me gustaría llamarles su atención sobre un indicador adelantado relativamente nuevo como es el índice Ceridian de la universidad de UCLA. Contrariamente a bastantes indicadores adelantados, que en realidad tienen un desfase significativo entre su publicación y el hecho que tratan de medir, el índice Ceridian es inventarios en movimiento, es prácticamente “real time”. Mide de manera muy detallada el consumo de diesel por la flota de grandes camiones norteamericana. Los tres últimos meses consecutivos han sido negativos y el valor de septiembre sorprendió por su nivel y su tendencia. Comienzan a ser consistentes con niveles cuasi recesivos. Tendremos que esperar tres semanas para conocer el dato de octubre pero si este vuelve a ser fuertemente negativo podría ser sintomático de que la recesión ha comenzado ya. En cualquiera de los casos las carteras de inversión deben estar preparadas para el entorno cíclico al que nos enfrentamos.