Brasil ha eliminado oficialmente el impuesto que imponía a los inversores extranjeros de bonos, una medida que había provocado una reducción de los flujos de capitales hacia el país a lo largo de los últimos meses. “Este cambio debe ser visto como un hecho positivo para los inversores, aunque todavía deberían realizar un análisis crítico sobre los esfuerzos que está llevando a cabo el Gobierno carioca para mejorar la situación de la economía”, afirma Fran Rodilosso, gestor de carteras de Market Vectors ETF en un artículo publicado en el Daily Finance.
“Este impuesto había desincentivado la inversión en deuda pública brasileña a corto plazo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta medida no representa necesariamente la liberalización del real brasileño. Aunque el impuesto sobre los flujos de renta fija extranjeros se encuentra ahora en el 0%, podría elevarse de nuevo. Todavía se espera que el país utilice los controles de capital que estime convenientes, mientras que otras cargas impositivas, como el impuesto del 1% sobre los dividendos, aún permanecen”, explica el experto.
Rodilosso interpreta la decisión de mover el impuesto del 6% al 0% como una clara señal de que tanto el Gobierno de Dilma Rousseff como el banco central de Brasil siguen preocupados por la inflación, que ya está por encima del objetivo y que, además, se está viendo agravado por una verdadera debilidad económica”, afirma. “El fin del impuesto es una buena noticia para los inversores que buscan añadir exposición a fondos en moneda local. La entradas en ETF y fondos de inversión que invierten en bonos emitidos en moneda local ya no están sujetos a dicho impuesto. La decisión de Brasil es un paso positivo”.
“Sin embargo, el fin del impuesto es una buena noticia para los inversores que buscan añadir exposición a fondos en moneda local”, continuó Rodilosso. "Las entradas en los ETFs y los fondos de inversión que tienen bonos locales, en moneda local de Brasil ya no estarán sujetos a dicho impuesto del 6 por ciento en la parte de las propiedades de tales fondos que invierten en estos instrumentos. En ese frente, la decisión de Brasil es un paso positivo”, explica Rodilosso, con una experiencia de 20 años en estrategias de renta fija, 17 de los cuales cubriendo mercados emergentes.