BlackRock propone un nuevo sistema de clasificación para los productos cotizados

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Larry Rosenstein, Flickr, Creative Commons

No es la primera vez que BlackRock defiende que ha llegado la hora de reclasificar los productos cotizados que engloba de forma genérica la etiqueta ETP. “Si los riesgos de un ETP son sustancialmente diferentes, deberían llamarse de forma diferente”, apunta Barbara Novick, vicepresidenta de la gestora.

En una carta –que cita Financial Times– enviada a la Securities and Exchange Commision (SEC) estadounidense en respuesta a una consulta del regulador, BlackRock propone una nomenclatura similar a la que ya le sugirió al Consejo de Estabilidad Financiera en 2011. Por un lado, mantiene la división existente entre fondos cotizados (ETF) y pagarés cotizados (ETN) pero, además, propone añadir el término ‘materias primas cotizadas’ para aquellos productos que no se ajustan a la Investment Company Act de 1940 –y que, por tanto, están sujetos a diferentes requisitos de información, supervisión y fiscales– e ‘instrumentos cotizados’ para los ETF apalancados, inversos o que no replican exactamente su índice.

La cuestión no es menor: restringir el tipo de productos que pueden considerarse fondos cotizados y establecer diferentes procesos de autorización y supervisión para aquellos que quedan fuera de esa definición podría acelerar el lanzamiento de ETF y reducir la complejidad a la que se enfrentan actualmente los inversores.

Como señala la gestora estadounidense en la carta, ciertas cuestiones como la liquidez y el funcionamiento del sistema de arbitraje varían considerablemente según la estructura y las posiciones subyacentes del producto, razón por la que diferenciar entre productos ayudaría a reguladores e inversores a entender mejor la estructura de los diferentes ETP y a centrar la presión regulatoria donde sea realmente necesario, argumenta.

El nuevo sistema de clasificación también contribuiría a reducir el tiempo de lanzamiento de un nuevo ETF, sobre todo en el caso de las estrategias activas que ahora mismo deben someterse a una revisión adicional por parte del regulador simplemente porque no replican un índice. “El proceso de aprobación de un fondo nuevo es bastante pesado y consume recursos”, apunta Novick, que aboga porque la aprobación de nuevos productos “que se ajusten a la definición de ETF que proponemos” siga un proceso mucho más superficial.