El último lanzamiento de BlackRock se centra en un pequeño gran universo: small caps globales. El objetivo del ETF es ofrecer exposición a la creciente demanda por parte de los inversores a valores de pequeña capitalización de mercados desarrollados.
De esta manera, el iShares MSCI World Small Cap UCITS ETF (WSML) se presenta como una herramienta para que los inversores puedan incluir matices en su asignación a renta variable, al actuar como un bloque o building block con el que construer una asignación a esta parte del basto universo de la renta variable, pero con un nivel inferior de riesgo indiosincrático, frente a la inversión en valores individuales.
El ETF replica un índice que ofrece acceso a más de 4.000 small caps de 23 mercados desarrollados, que suponen aproximadamente el 14% de la capitalización ajustada al free float de cada mercado. Entre las empresas a las que el ETF ofrece exposición figuran valores de los segmentos de real estate, materiales básicos e industriales.
David Moroney, Responsable de Producto de iShares para la región EMEA, explica que este lanzamiento llega en un contexto macro que “está alentando a los inversores a revisar su asignación a small caps globales”, dado que este tipo de compañías tradicionalmente han sido las grandes beneficiarias durante las fases de expansión económica “al tender estas compañías a añadir empleados más rápidamente y contribuir más rápido al crecimiento”. Además, destaca que, gracias a su enfoque nacional, “las empresas más pequeñas tienden a beneficiarse de las políticas nacionales de crecimiento y sufrirán menos impacto por parte de los cambios futuros en acuerdos de comercio globales”.
El iShares MSCI World Small Cap UCITS ETF es de replica física y presenta un TER total del 0,35%.
