BGF Global Allocation, la opción flexible para una inversión global

Si un inversor particular acudiera a su sucursal bancaria habitual y le dijera a su gestor comercial que quiere comprar acciones de una pequeña compañía brasileña o un bono de una empresa japonesa es muy probable que lo que consiga a cambio sea una sonrisa. Esta sonrisa puede tener dos connotaciones. La primera puede ser nerviosa porque el empleado de la sucursal no sepa de qué le está hablando. La segunda, puede ser de resignación porque, a pesar de que sí sepa de qué le están hablando, también sabe que las dificultades operativas que suponen esas inversiones hacen que sean casi inviables desde una pequeña sucursal de barrio.

Entonces, ¿un pequeño inversor no puede aprovecharse de un mercado global donde cada vez es más elevado el número de activos y zonas geográficas donde invertir? La respuesta, lógicamente, es que sí que puede. Pero la mejor manera de hacerlo, la más eficiente, es hacerla mediante un fondo de inversión. En este caso un fondo que puede invertir en cualquier zona geográfica del mundo y tanto en renta variable como en renta fija de forma muy diversificada.

Una de las gestoras que cuenta con este tipo de fondos es BlackRock gracias a su producto Global Allocation Fund. Esta entidad, una de las tres mayores del mundo en activos bajo gestión, tiene gestores y analistas repartidos por todo el mundo que gestionan sesenta y tres fondos.

Los responsables de decidir dónde invertir los 13.755 millones de dólares del patrimonio del fondo son Dennis Stattman, Aldo Roldan y Dan Chamby. Entre los tres suman casi un siglo de experiencia en el mundo de la gestión. Y lo más importante: pueden invertir en valores de renta variable, renta fija y activos monetarios tanto de gobiernos como de empresas sin ninguna limitación preestablecida.

Para darnos cuenta de la gran diversificación de la cartera del fondo sólo tenemos que ver el desglose por activos, por regiones y por sectores. Si atendemos a los activos, el mayor peso se lo lleva la renta variable, con un 64,1%, mientras que la renta fija y la liquidez pesan un 26,8% y un 9,1%, respectivamente.
En cuanto a la distribución geográfica, lo que más pesa en cartera es la renta variable norteamericana, con un 36%, seguida por la renta fija norteamericana, con un 24% y la renta variable europea con un 9%. Por debajo del 8% se encuentran activos como la renta variable japonesa (7%), bonos de mercados emergentes (5,4%), renta fija europea (4,8%), renta fija Asía-Pacífico (2,7%) y renta fija japonesa (1%).

También destacamos su alta diversificación a nivel sectorial. El sector al que más importancia da el gestor es el energético, con un 14,9% de la cartera, mientras que el que menor presencia tiene es el de consumo básico, con un 6,4%. Por compañías, el fondo incluye más de 700 posiciones diferentes, seleccionadas siguiendo el análisis interno realizado por el equipo de inversión y centrándose, sobre todo, en empresas que en opinión de los gestores, se encuentran infravaloradas por el mercado.

El 5% del fondo está invertido en oro, empresas mineras y otros valores relacionados con metales preciosos, como cobertura a la incertidumbre de la política monetaria global y al riesgo divisa. El Fondo sigue infraponderando las divisas de mercados desarrollados y sobrepondera las divisas asiáticas, latinoamericanas y otras emergentes dónde los intereses a corto plazo ofrecen rentabilidades más atractivas que en mercados desarrollados.

El inversor puede optar por invertir en dólares, en euros o en euros con cobertura de divisa. La rentabilidad en lo que va de año de la clase con cobertura de riesgo divisa es del 6,32% y la anualizada a tres años 9,68%. En 2011, perdió un 5,7%, mientras que en 2010 y 2009 ganó un 6,4% y un 19,7% respectivamente, rendimientos que superan la media de su categoría.

Desde su lanzamiento el Fondo ha obtenido una rentabilidad acumulada de 190.22%, batiendo índices de renta variable global como el FTSE World Index (+53.79%) y el MSCI World Index (+44.32%). Y todo ello con aproximadamente un 33% menos de volatilidad.

Un fondo para que, en lugar de contar con sólo sonrisas, un inversor pueda acceder a todos los mercados y todos los activos de la mano de un equipo de especialistas.

 

Departamento de Análisis de PROFIM Asesores Patrimoniales, EAFI.