Belgravia Beta SICAV: un todoterreno con buenos amortiguadores

Análisis elaborado por... Hoy traemos a este apartado uno de esos “animales” de la gestión española que destaca por dedicarse exclusivamente a gestionar. Son independientes (no pertenecen a ningún grupo financiero) y llevan ya más de diez años haciéndolo de cine.

Decir que su objetivo es obtener rentabilidad positiva “pase lo que pase” con la bolsa tuvo el peligro de convertirse en un topicazo allá por finales de 2008, pero viendo los resultados de Belgravia Beta podemos decir que hay quienes gestionan teniendo muy grabado ese objetivo.

El universo de inversión de Belgravia Beta es la renta variable europea. Su manera de gestionar responde a lo que nosotros llamamos “gestores flexibles”, es decir, aquellos que son capaces de modular el nivel de exposición a bolsa de su cartera dependiendo de cómo vean los mercados y de lo atractivas o no que vean las oportunidades de inversión. Es a gestores como los de Belgravia a los que les pedimos que estén dentro cuando el mercado tira, pero que se bajen del carro cuando las cosas se ponen feas. Y eso es exactamente lo que hacen.

Su principal característica es, por tanto, la gestión activa de su cartera, pudiendo variar libremente el nivel de inversión en renta variable. (El capital no invertido en renta variable se coloca en repos de deuda pública). Su inversión media histórica en bolsa se sitúa en el 50%, pero la realidad es que son tan flexibles, que son capaces de subir y bajar el peso en bolsa en varias ocasiones en periodos de tan sólo un mes.

Leyendo este dato nos damos cuenta de que la captura de rentabilidad no viene solamente por la beta. Para ellos, lo más importante es la generación de alpha que les permita cumplir con sus objetivos sin ocurrir en un riesgo de mercado muy elevado. Y a lo largo de su historia han demostrado que son capaces de hacerlo: desde inicio, el alpha generada por el fondo es de un 8% anual.

Y… ¿cómo lo hacen?

Su estilo de gestión es ecléctico: ni value, ni growth, ni momentum, ni fundamental… sino una mezcla de todos ellos y mucho sentido común. Su proceso de inversión se basa en el Análisis Fundamental combinado con técnicas de trading y consideraciones macro (no es posible obviar lo que pasa a tu alrededor) para poder cumplir con el objetivo de rentabilidad absoluta (positiva) en periodos anuales.

Desde siempre, pero ahora más que nunca, una correcta selección de valores es esencial. La rotación sectorial que están viviendo los mercados es tremenda, por lo que la agilidad en el stock picking se vuelve primordial. Para ellos es la manera de que el componente de rentabilidad venga por ahí y no tanto por la evolución del mercado.

El comportamiento en 2009 de Belgravia está siendo espectacular (+13.38% a cierre de octubre), y se une así al grupo de esos pocos que supieron esquivar dignamente la sangría de 2008 (cerró con un resultado de -12.08% frente a una caída superior al 43% del Stoxx 600) y que además están sabiendo aprovechar las oportunidades de 2009.

Es en momentos como los que vivimos hace no tantos meses donde realmente se aprecia el valor de la gestión de Belgravia Beta. Como ellos dicen, el stock picking añade rentabilidad en épocas alcistas, siendo capaces de capturar aproximadamente dos tercios de la subida de la bolsa, pero lo que es más potente es su efecto amortiguador, ya que, en épocas bajistas, permite limitar a una cuarta parte las pérdidas.

Por su gestión activa de la exposición a bolsa es esperable que en años muy fuertes de bolsa sus resultados sean más modestos que los del mercado, pero su objetivo, como decíamos no es batir al índice sino “obtener rentabilidad positiva con un Ratio de Sharpe superior al del Stoxx 600 y una volatilidad inferior a la de dicho índice”. Y esto han de lograrlo en el conjunto de ciclos alcistas y bajistas.

Su disciplina, trabajo en equipo y dedicación exclusiva a la gestión ha permitido no sólo que logren este objetivo desde julio de 1999, cuando empezaron, sino que lo hagan brillantemente. Desde inicio, la rentabilidad anualizada de Belgravia Beta es del 9.70% (frente al -2.32% de su índice, con datos hasta el 30 de octubre), y lo han obtenido, además, con una volatilidad histórica inferior a la de la bolsa (10.93% versus 17.30% anualizado).

Como perfeccionamiento del mecanismo de amortiguación, se marcan también una pérdida puntual máxima, que en su caso no ha sido superior al 16%, frente a caídas de un 60% del Stoxx 600.

Su visión de los mercados en la actualidad refleja un cierto escepticismo respecto a la subida que estamos viviendo desde los mínimos del mes de marzo. Creen que es un parón dentro de un mercado bajista y no ven señales de mejoría en los países desarrollados hasta finales de 2010.

Por el contrario, están positivos con los mercados emergentes, principalmente Asia y Oriente Medio. Por este motivo han incorporado a su cartera compañías europeas con exposición fuerte al crecimiento saneado de estas economías emergentes que además presenten valoraciones atractivas (PER entorno a 10 veces o menos).

A cierre de octubre, tenían una inversión neta en renta variable del 17.5%, y venían de niveles de inversión cercanos al 60%, lo que nos da idea de su rapidez y flexibilidad a la hora de adaptar su cartera. Recientemente han aumentado la inversión en grandes compañías con sesgo defensivo, reduciendo notablemente las posiciones en compañías de mediana capitalización.

Conclusión

En nuestra opinión, Belgravia Beta SICAV es un producto que rubrica eso de que “el movimiento se demuestra andando”. Los más de 30 años de experiencia en el mercado de renta variable europea de su

equipo de gestión y su sólido comportamiento desde que comenzó a andar Belgravia, allá por 1999, atravesando dos severas crisis de los mercados, nos dan claras muestras de que la gestión activa tiene valor cuando los que gestionan se dedican precisa y solamente a gestionar.

Para todos aquellos que en estos tiempos nos preguntan cómo saber cuándo (y cuánto!) hay que estar en bolsa, nosotros ponemos ejemplos como el de Belgravia Beta y les decimos “delega esa decisión en los que saben cómo hacerlo”.