BBVA impulsa una unidad para dar servicio a los principales bancos

En su estrategia de banco global, BBVA refuerza su Financial Institutions Group (FIG) con una unidad que cubrirá la relación con las principales entidades financieras del mundo. Al frente de FIG estará Krishna Prasad, que fue fichado en 2008 para dirigir el negocio alternativo de la entidad española. A semejanza de otros bancos de alcance mundial, como Goldman Sachs o UBS, la entidad presidida por Francisco González quiere cuidar la relación con los grandes inversores institucionales del mundo.

La reforzada FIG, que se encuentra dentro de Wholesale Banking & Asset Management, es la responsable las relaciones que BBVA tiene con estos grandes bancos. Este tipo de unidades son frecuentes en los grandes bancos globales que ofrecen servicios a otras entidades internacionales. Para ello, ha reforzado el equipo con la incorporación de banqueros con alta experiencia en mercados internacionales.

BBVA ha ido implementando en el último año una estrategia de banca global en sus unidades de banca corporativa y de gestión de activos para aprovechar su presencia en Europa, América (tanto Latinoamérica como EEUU) y Asia. En esta nueva estrategia se enmarca el refuerzo de la unidad de FIG.

Los Financial Institutions Group nacieron en el mundo de la banca de inversión con el objetivo de ofrecer servicios más personalizados a sus grandes clientes institucionales. En los últimos años los bancos globales también han optado por crear este tipo de unidades para centralizar sus relaciones con otros grandes bancos. También se pueden encontrar esta figura en gigantes del capital riesgo, como Carlyle Group. Entre las entidades españolas, sólo Santander cuenta con una unidad de este tipo.

La creación de estas unidades en las que se ofrece un servicio personalizado para los grandes clientes institucionales ha provocado una concentración del negocio de banca de inversión y se ha convertido en una de las principales fuentes de ingresos del sector financiero. Según cálculos realizados en los últimos años por varias consultoras financieras, las operaciones realizadas a través de los FIG pueden generar al mundo de la banca de inversión unos ingresos anuales cercanos a los mil millones de dólares.