Barclays Capital Fund Solutions: Manager de activos del año

Con clientes cada vez más cautos a la hora de aprovisionarse con productos de bancos de inversión, el valor agregado de la práctica de manejo de riesgo de BCFS ha forjado un seguimiento comprometido entre los managers de patrimonio y distribuidores de fondos de la región.

“Nos preocupa el riesgo y su manejo efectivo en los diferentes niveles del negocio”, dice Chris Faddy, líder de distribución con BCFS Asia (excluyendo Japón) en Singapur.  

Al igual que muchos managers de activos modernos, BCFS no se restringe a un único estilo de inversión, sino que utiliza una combinación de estrategias técnicas, que dependen del comportamiento de las clases de activos subyacentes y de los mercados.

No obstante, a diferencia de los managers del mercado extrabursátil, BCFS tiene acceso directo a la inteligencia del mercado y a las capacidades de precio y aprovisionamiento de producto de un banco de inversión, lo que le otorga una ventaja potencial.

“Tenemos acceso a información e investigación de alta calidad, lo que nos permite probar, regularmente y de manera confiable,  si el mercado se acomoda al tipo de riesgo que estamos tomando”, dice Faddy.

BCFS usa el modelo de optimización de variables Black-Litterman para agrupar información técnica del mercado y así corroborar los signos fundamentales generados por sus procesos cuantitativos principales. El modelo se basa en la teoría de que la colocación de activos debe ser proporcional a los valores que tenga el mercado de los activos disponibles.

BCFS tiene una perspectiva macro, que resulta de la unión de los enfoques cuantitativo y discrecional. Así es posible ofrecerles a los managers de fondos la habilidad para hacer caso omiso de los procesos automatizados para manejar portafolios de riesgo, en los que se presentan desafíos que los algoritmos no analizan bien.

“Está muy bien tener un modelo, pero en donde nos diferenciamos de los otros managers de fondos que usan modelos cuantitativos macro es en nuestro comité de inversión, que supervisa ese modelo. Yo lo comparo con volar un avión –hay un piloto automático que trabaja mucho, pero de todas formas se necesita una persona para aterrizar”, explica Faddy.

La intervención humana le permite a BCFS no hacer uso de algoritmos que pueden obviar indicadores subjetivos. En 2010, por ejemplo, el patrón de titulares acerca de las protestas griegas, las prohibiciones de ventas cortas en Alemania y el colapso del mercado accionario de Nueva York el 6 de mayo, tuvieron impacto en el movimiento de los mercados.

El comité de inversión analiza y actúa con base en métricas de riesgo que pueden ser cuantificadas fácilmente y la conformidad interna requiere que el equipo de portafolio evalúe si se debe disminuir el riesgo o no.