AXA IM, escéptica sobre la efectividad de las medidas del BoE para fomentar el crédito

bank_20of_20england
Foto: Baldu Mart

El volumen de crédito de las entidades británicas acumula ya cuatro años de descensos, con lo que eso implica para la economía. El Banco de Inglaterra intenta fomentar la financiación a familias y hogares a través de un plan que supondrá la entrega de al menos 5.000 millones de libras (unos 6.300 millones de euros) a las entidades financieras que lo soliciten a un plazo de seis meses. AXA IM muestra en un informe su escepticismo respecto a la utilidad de esta medida y espera a que se conozcan los detalles para poder mostrarse más optimista con las iniciativas que se van a poner en marcha. 

Ese mecanismo, denominado ECTR, podría ayudar a convencer a los bancos de que no necesitan tener un exceso de liquidez en sus balances (como ocurre ahora) porque ya está el BoE para proveerles de cuantos fondos necesiten. Eso debería implicar que van a dedicar una parte mayor de sus balances para préstamos, pero en AXA no creen que eso vaya a ocurrir.

Algo más de esperanza, aunque a la espera de conocer los detalles de la medida, muestra la entidad respecto a la posibilidad de que el Banco de Inglaterra adquiera activos del sector privado. Cree que quizá ese sí sería el camino para elevar así la financiación en el mercado británico. 

Otra de las medidas que está sobre la mesa es la concesión al sector bancario de préstamos garantizados con tasas por debajo del precio de mercado mientras el Gobierno ofrece una garantía de crédito al Banco de Inglaterra.

AXA IM hace notar en su informe el hecho de que pese a que este problema en la financiación es patente desde hace cuatro años, el Banco de Inglaterra ha puesto ahora en funcionamiento estas medidas como un plan de contingencia para un posible hecho excepcional en la zona euro.

Ante todas estas circunstancias, la entidad considera que la inversión en deuda y en acciones de los bancos británicos sigue siendo de riesgo.