Tras labrarse su merecida fama como gestores activos de bolsa europea, Alken Asset Management presenta ahora las estrategias con las que competirá en el segmento de la renta fija. El pasado abril la boutique fundada por Nicolas Walewski anunciaba su incursión al mundo de los bonos. Y lo hizo dando un golpe de efecto al fichar a Antony Vallée como socio y nuevo responsable de renta fija desde JP Morgan AM, donde era responsable de bonos convertibles y estructura de capital.
“Es una nueva aventura tanto para mí como para la gestora”, contaba Vallée en una reciente visita a Madrid, donde la firma presentó en sociedad sus primeros fondos de renta fija. Los dos vehículos, uno de bonos convertibles globales y otro de income opportunities, tendrán el mismo ADN que los demás productos de Alken AM. Centrarán sus esfuerzos únicamente en corporativos. “Si lo que busca es deuda gubernamental, mejor busque en otras firmas”, reconoció el gestor.
Alken abordará la renta fija con fondos pequeños, ágiles y cross-asset (a lo largo de varios activos). Precisamente la flexibilidad que podrán llevar a cabo los fondos es lo que atrajo a Vallée a la boutique. “El proceso de inversión, los fundamentales, es crucial”, aseguró, pero también las sinergias de la propia firma. “Cuando se invierte bottom-up también necesita información del equipo de renta variable”, explicó.
El proceso de inversión del nuevo equipo, compuesto también por Aymeric De Tappie, se resume en una premisa sencilla: invertir en buenas compañías. Y solo aplicarán esa filosofía en empresas cotizadas ya que son, afirman, más transparentes.
El Alken Global Convertible Bond se lanzará el próxima 6 de noviembre y la gestora tiene previsto arrancar el Alken Income Opportunities en la segunda mitad de noviembre
