Como habíamos comentado en el reporte anterior, la deuda venezolana denominada en dólares alcanzó un nivel mínimo de precios el pasado 19/02, fecha en que se entrega a las autoridades el líder opositor Leopoldo López. Los días siguientes comienza a subir muy discretamente para alcanzar en la semana que recién terminó un incremento por orden del 27%. Reflejado en la subida de precios del Venezuela Global 22, que en dicho lapso pasó de 78% a 98%.
Consistentemente la prima del CDS de la República a 10 años (póliza de seguro contra insolvencia de bonos a dicho plazo) bajó 45% ubicándose en niveles de 895 puntos básicos.
En un principio se atribuyó la subida a la aparición del SICAD II, al que todos reconocemos como un mecanismo útil en la medida en que realmente funcione como el Ministro Ramírez dijo que iba a funcionar, pero dado el comportamiento de este mercado y el de su gemelo el llamado paralelo, daba la impresión de que el mercado estaba dando una excesiva valoración a una promesa de liberación cambiaria.
Cuando los mercados de deuda soberana emergente suben rápidamente sin razón aparente, los que los seguimos habitualmente sentimos una cierta incomodidad porque nuestra intuición nos dice que alguien sabe que el resto no sabe. Y normalmente, gracias a las imperfecciones informacionales cuando la tendencia se empieza a consolidar buena parte de la subida ya ha pasado.
La pista esta vez no las dan los reportes de carácter privado que los bancos de inversión escriben para sus clientes preferenciales.