Aceite de palma: queremos influir para mejorar los estándares

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Cedida por NN IP

TRIBUNA de Faryda Lindeman, Senior ESG Specialist de NN IP. Comentario patrocinado por NN IP.

El aceite de palma se obtiene de la palma aceitera, que crece principalmente en regiones de clima tropical húmedo y es la fuente más productiva de aceite vegetal conocida. El aceite de palma encuentra uso en todo el mundo en una amplia gama de productos, como alimentos preprocesados, cosméticos, productos de limpieza y productos para el cuidado personal. También se utiliza como biocombustible, habiéndose convertido en la opción verde para el transporte.

El reto

No son pocas las polémicas que afectan al aceite de palma: deforestación; polución del aire, el agua y el suelo; cambio climático; desafíos a los derechos humanos y consecuencias de su consumo para la salud. Estas controversias han concienciado sobre las cuestiones que afectan al sector y son muchas las ONG que interpelan a las partes interesadas para intentar mejorar los estándares medioambientales y sociales.

Impacto ambiental

El mayor impacto ambiental de la producción de aceite de palma es la deforestación a gran escala. Como consecuencia, algunos pueblos indígenas han sido expulsados de sus tierras, además de haber perdido sus hábitats especies animales como elefantes, orangutanes, rinocerontes o tigres.  

Impacto Social

Este sector también sufre importantes retos relacionados con los derechos humanos. Los derechos de las tierras no son claros, y muchas comunidades locales reclaman derechos de propiedad. Aún así, hay muchas comunidades que han sido expulsadas de su propiedad para utilizar esas tierras como plantación, creando conflictos entre empresas, comunidades y gobiernos. El trabajo en las plantaciones también expone al sector a problemas laborales, siendo comunes el trabajo forzado o en condiciones de servidumbre y el trabajo infantil.

Aceite de palma sostenible

El aceite de palma está presente habitualmente en numerosos productos de consumo. Su cadena de suministro puede ser larga y compleja, y las empresas que se ocupan del cultivo, la molienda, el comercio, el refino o el procesamiento suelen ser diferentes, al igual que sucede con minoristas y fabricantes. El aceite de palma crudo se procesa en varias etapas y, debido a una falta general de transparencia en la etapa de refino, el consumidor final no tiene forma de identificar a quienes cultivan la palma o extraen el aceite. Apoyamos la labor de organizaciones como la Mesa Redonda del Aceite de Palma Sostenible (RSPO), que representa a toda la cadena de suministro y que ha establecido un sistema de certificación para garantizar que el aceite de palma se ha producido de manera sostenible y que se negocia de forma transparente.

Un enfoque centrado en nuestro compromiso y objetivos

NN IP se expone al aceite de palma a través de sus inversiones y considera que su influencia puede mejorar los estándares en el sector. La complejidad de la cadena de suministro nos lleva a pensar que la exclusión no es la respuesta. Nos parece preferible el compromiso de todas las partes a lo largo de dicha cadena, desde los productores de aceite de palma hasta los minoristas.

Nos hemos propuesto una serie de objetivos:

• Mejorar la trazabilidad del aceite de palma y procurar establecer sistemas de certificación para productores, comerciantes y procesadores

• Exigir a las empresas que apoyen y respeten los derechos humanos, mejoren las condiciones de trabajo en las plantaciones de palma aceitera y reconsideren su modo de participar en la comunidad

• Aplicar prácticas agrícolas sostenibles, reduciendo el uso de pesticidas tóxicos y adquiriendo un compromiso de deforestación y turba cero, preservando los recursos naturales y la biodiversidad

• Desarrollo de los pequeños propietarios para mejorar sus estándares y conocimientos.

Resultados hasta ahora

Las principales empresas con las que nos relacionamos han demostrado hasta ahora voluntad de comprometerse con la sostenibilidad y han establecido por lo general reglamentos internos en relación con el aceite de palma. El próximo reto está en llevarlos a la práctica.

Nuestra influencia nos permite supervisar el progreso y, al relacionarnos con productores de alimentos y minoristas, presionaremos para que contribuyan a transformar el sector. Hemos desarrollado un baremo para las empresas con las que nos relacionamos y, mediante instrumentos como el kit para la transparencia del aceite de palma sostenible (SPOTT) y la investigación sobre criterios ESG, continuaremos supervisando estas empresas y comprometiéndonos con ellas para garantizar la mejora. No obstante, aún hay un largo camino por recorrer.