2011 será un año de convalecencia económica según Generali Investments

El año 2010 se ha caracterizado por continuas repercusiones de la crisis crediticia. Desde Generali Investments anticipan una continuación de esta tendencia durante el próximo año, "aunque con una intensidad a la baja”, según Klaus Wiener, director de Investigación de Generali Investments. “2011 será un año de gradual convalecencia económica, en el que no obstante subsistirán grandes riesgos políticos”, apostilla.

En el mundo industrializado occidental, la firma cree que el crecimiento subyacente y la inflación se mantendrán en niveles relativamente bajos, debido a la contención del crédito, el desapalancamiento de los hogares y la consolidación fiscal, que seguirán pesando negativamente en el conjunto de la demanda. En contraste, el aumento del PIB en los mercados emergentes será sólido, aunque no lo suficiente como para devolver a las economías occidentales a sus antiguas sendas de alto crecimiento. En la UEM, esperan que se hagan progresos en la reformulación del Pacto de estabilidad y crecimiento.

Más riesgo de desinflación que de inflación

Puesto que el output gap (la diferencia entre el crecimiento real de una economía y su crecimiento potencial no inflacionista) seguirá siendo importante, la gestora considera que el riesgo de desinflación –e incluso deflación– será en 2011 más significativo que el de inflación.

Más allá de 2011, hay motivos para pensar que las fuerzas desinflacionistas desaparecerán gradualmente. El comportamiento de los bancos centrales tendrá una importancia clave, sobre todo en Estados Unidos. A pesar del riesgo considerable que conlleva, pensamos que la Reserva federal aumentará la magnitud de su programa de flexibilización cuantitativa (QE2) en cierta medida (retirada gradual). Esta iniciativa marcará la tónica de los mercados financieros.

Buen entorno para las bolsas, materias primas y el crédito

Partiendo del supuesto básico de que se evitará una nueva caída en recesión, la renta variable y las materias primas tendrán un buen comportamiento, dicen en Generali Investments. Por su parte, la rentabilidad de la deuda corporativa no será tan alta como en 2010; no obstante, esta clase de activos volverá a producir rendimientos notablemente positivos.

La rentabilidad de los principales títulos de deuda pública seguirá siendo baja mientras la Reserva Federal mantenga su proceso de flexibilización cuantitativa y las presiones sobre los precios sean bajas. La rentabilidad no empezará a remontar hasta bien avanzado 2011, con lo que la deuda pública de los principales países será una de las clases de activos con peor comportamiento durante el próximo año. Deberá también mantenerse la precaución hacia los mercados periféricos de deuda pública de la zona euro, puesto que prevemos que persistan las dudas sobre la sostenibilidad fiscal de varios de los países más pequeños.

El dólar seguirá debilitándose, al tiempo que es probable que las tensiones comerciales internacionales se recrudezcan en 2011. No obstante, es improbable el escenario de una “guerra cambiaria”, como tampoco lo es el de un proteccionismo a ultranza.

En conjunto, según nuestra previsión, 2011 será un año de gradual convalecencia económica, en el que persistirán grandes riesgos políticos, sobre todo como consecuencia de la escalada de la crisis del crédito soberano y la finalización prematura de la QE2.

 

Fuente: Generali Investments