2011, buen año para el Ibex pero negativo para los fondos españoles, según Ahorro Corporación

"2011 será un año de ralentización económica del crecimiento a nivel global, aunque sin llegar a la recesión, y que dará paso a finales del año a una aceleración económica que empezará a notarse en 2012", según Marisa Mazo, directora de estrategia de Ahorro Corporación. Desde la entidad, calculan que la prima de riesgo España podría reducirse hasta 150 puntos básicos, lo que se traducirá positivamente en la bolsa española, si bien el dinero aún se resistirá a entrar en los fondos de inversión.

“Resulta prematuro aventurar una entrada de capital en los fondos, ante la continuidad de la guerra de depósitos –eso sí, suavizada a lo largo del año-. No creo que el año sea excelente para los fondos españoles pues no está entre las prioridades de productos en los que piensan las redes bancarias”, comenta Pedro Mirete, director de desarrollo de negocio de Ahorro Corporación.

Diferencial en 150 puntos básicos

Sin embargo, con respecto a la bolsa española, las perspectivas son positivas, aunque irá de la mano del riesgo país, que "debería bajar hasta 150 puntos básicos de diferencial con respecto al bono alemán", señaló Mazo. "Todos los años hay sustos, y la clave está en el cumplimiento de los objetivos de déficit público, que parece que se están cumpliendo, pues se traducirán en una mejora del riesgo país que influirá positivamente en las bolsa, aunque tampoco se puede corregir el problema en un corto plazo", señala la experta. De hecho, indica que el año pasado se equivocaron, apuntando un Ibex en 14.600 puntos, debido al disparo de la prima de riesgo. "Pensábamos que no subiría de los 40 puntos básicos y ha llegado a superar los 300 y cada 50 puntos básicos tienen un impacto en bolsa del 4,6%", comenta, indicando que pensaban que los mercados serían benignos con el déficit público ante la necesidad de medidas de apoyo a la economía, algo que no han sido.

Para 2011, sitúa al Ibex a final de año en el entorno de 12.500 puntos y el crecimiento del beneficio por acción el año próximo en el 10% y en el 11,8% en 2012, si bien contempla riesgos de ampliaciones de capital, riesgos soberanos e incrementos de la aversión al riesgo. En cuanto a las ampliaciones de capital, los analistas señalan que la mayor parte vendrán del sector financiero, y señalan que las condiciones del mercado podría permitir a las cajas de ahorros emitir cuotas participativas con derechos políticos a partir del segundo semestre del año.

Más riesgo en las carteras

En este escenario, recomienda carteras con un incremento de los activos de riesgo, como bonos autonómicos con mayores diferenciales que tenderían a estrecharse o un aumento de las posiciones en bolsa. Según Irma Garrido, directora de análisis de Ahorro Corporación, el escenario central que maneja la compañía es de un Ibex 35 en 12.678 puntos a finales de 2011, lo que supone una revalorización de entre el 23% y el 24%. Y, si el riesgo aumenta, el Ibex podría situarse en 10.283 puntos, lo que deja aún potencial desde los niveles actuales. Con todo, recomienda una cartera diversificada con valores tanto del Ibex como otras small y mid caps, con exposición al crecimiento exterior ("la dependencia del Ibex con respecto a Latinoamérica se sitúa ahora en el 32% de los beneficios, desde el 24% de hace dos años, y pensamos que se irá incrementando hasta alcanzar el 40%", comenta) y entrada de valores castigados en exceso por el riesgo país y que están preparados para el nuevo entorno. En definitiva, considera que es un buen escenario para el stock picking.

Entre sus recomendaciones hay 23 valores de compra, entre los que están, por orden de ravalorización, CAF, Duro Felguera, Ferrovial, Almirall, Técnicas Reunidas, Telefónica, Miquel y Costas, Vidrala, Abertis e Inditex. En cambio, hay seis valores que recomiendan vender (Bankinter, Banco Sabadell, Indra, Abengoa, Endesa e Iberdrola), aunque los expertos explican que pueden salir de su cartera de venta en cualquier momento. Si la situación se normaliza, daría también entrada al sector financiero, en nombres como Santander, Popular o Mapfre.

Un año clave

En resumen, la incertidumbre seguirá dominando los mercados, pero en Ahorro Corporación tienen claro que 2011 será un año clave para los mercados, porque de las medidas que se tomen en los próximos meses dependerá en gran parte la deriva de la economía mundial y de los mercados financieros. Sobre todo, será un año clave en tres aspectos: en primer lugar, para los mercados financieros, pues los canales ahorro-financiación-inversión siguen sin funcionar. "El funcionamiento del interbancario y la traslación de las medidas financieras en la economía real son claves para salir de la recesión", apuntó Pedro Mirete, convencido de que el papel de los bancos centrales será fundamental. Marisa Mazo habla en este sentido de "trampas de liquidez, pues las empresas no invierten y los canales de trasmisión de capital no funcionan, lo que impide que las políticas monetarias se trasladen a la economía real".

En segundo lugar, 2011 será clave para el euro, ante la inexistencia de una verdadera Europa económica; y en último término, para las reformas estructurales que ha de afrontar la economía española. Entre ellas, según Mazo, está la profundización en la reforma laboral, la reforma de la estructura impositiva española que actualmente no favorece la competitividad de las empresas (clave para reducir el déficit exterior), la reforma energética para limitar la dependencia del petróleo y la reforma de la burocracia y administración, acompañada de los cambios en la educación.

En el plano macro, el crecimiento de EEUU se situará en el 2,3%, con el riesgo de desempleo y déficit público, hasta ahora tolerado por los mercados. En la eurozona, que afrontará impacto de la consolidación fiscal y marcará importantes diferencias entre países, con Alemania "tirando de la economía europea", en el 1,3%. En España, calculan que será de sólo el 0,5%, un nivel positivo pero aún insuficiente para crear empleo, uno de los riesgos clave junto al déficit público y la financiación externa. "Se nos acusa a los analistas de ser demasiado pesimistas y ojalá nos equivoquemos pero mantenernos estas previsiones en la banda más baja de los rangos barajados hasta que logremos reducir la dependencia de la demanda externa y se normalice la tasa de ahorro", explica Mazo.

Por su parte Latinoamérica seguirá creciendo, un 3,9% de media, aunque desde Ahorro Corporación son más optimistas con Brasil que con México, mientras China podría dar cifras de entorno al 9,6%, afrontando, eso sí, el problema de la inflación. Japón, por su parte, se conformaría con crecer en 2011 el 1,5%, ante el problema de competitividad para su economía exportadora que supone la continua apreciación del yen. En un escenario marcado por la guerra de divisas, sitúan el cambio medio dólar/euro en 1,40, si bien creen que habrá dos fuerzas opuestas que se alternarán a lo largo del año: por un lado, las políticas de relajación monetaria de EEUU, que impulsarán el dólar a la baja, y por otro, los problemas de riesgo periférico, que harán lo propio con el euro.