Tressis lanza un servicio de gestión de carteras de fondos ISR

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Sonny Abesamis, flickr, Creative Commons

Tressis amplía su oferta de servicios a las inversiones éticas. A partir de ahora, contará con un nuevo servicio de gestión de carteras de fondos de inversión socialmente responsables (ISR). Estos productos de inversión utilizan criterios extrafinancieros como la protección de la vida humana, el respeto a los derechos humanos, la defensa de la paz, la responsabilidad social de la empresa o el cuidado del medio ambiente, entre otros.

De forma inicial, hasta 13 gestoras tanto españolas como internacionales que disponen de fondos ISR entre su gama general de fondos han sido seleccionadas para el diseño de estas carteras. Entre ellas, se encuentran Santander AM, BBVA AM, Amundi, AXA, Candriam, Generali, Groupama, Mirova, Nordea, Parvest, Petercam, Pictet y BNP Paribas.

El nuevo servicio de Tressis está dirigido, sobre todo, a fundaciones y asociaciones sin ánimo de lucro, aunque también está abierto al cada vez mayor número de particulares sensibilizados con estos principios, detalla José Miguel Maté, consejero delegado de la firma española de asesoramiento y gestión de patrimonios.

La entidad ofrecerá dos tipos de carteras en función del perfil de riesgo: una cautelosa, con una exposición máxima a renta variable del 25%, y otra equilibrada, cuya exposición tope a bolsa asciende hasta el 60%. La inversión mínima de estas carteras es de 150.000 euros.

Enrique Garrido, asesor en Tressis de la dirección de Gestión de Patrimonios, también será responsable del servicio de Gestión de Carteras de Inversión Socialmente Responsable (ISR). En su opinión, “las inversiones socialmente responsables buscan una rentabilidad social sin renunciar a la rentabilidad financiera. De hecho”, puntualiza, “aplicar criterios y filtros ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ASG) a la selección de inversiones aporta un incremento significativo de los controles de riesgo”.

La elección de los fondos invertibles para las carteras también responde a criterios éticos que hayan sido certificados por organismos internacionales como los Principios para la Inversión Responsable de Naciones Unidas (Unpri, por sus siglas en inglés), entre otras instituciones.