Revisando la tendencia del empleo en USA

La pregunta de fondo es si esta es una tendencia que aguantará en el mediano plazo o si sólo obedece a factores temporales. Una cosa es cierta: los analistas saben que aún con los datos de empleo que se han venido registrando en USA, el desempleo estructural de esta economía seguirá elevado en los próximos años. Es decir, debemos olvidarnos de tasas de desempleo del 5% o inferiores, que fueron las registradas justo antes de la crisis financiera. Así que, con mucho esfuerzo, la economía norteamericana debe ver tasas de desempleo superiores en cualquier caso al 6%, por lo menos por los próximos 5 años, lo cual no es poco.

¿Ahora bien, es la tasa de desempleo del 8.3% una tasa real de las condiciones de la economía estadounidense? La respuesta es mixta, pues puede estar representando las condiciones actuales, pero también hay que tener claro que las condiciones no son las mismas que teníamos antes de 2008. Y esa es una diferencia bien importante si queremos entender la tendencia del empleo en los próximos años.

La primera diferencia grande es lo que los economistas llaman la Tasa de Participación, que se puede definir en términos sencillos como la porción activa de la fuerza laboral total de una economía. En la actualidad, esa tasa se encuentra en 63.9%, que es inferior al 66% que se observaba en 2007. Aunque el cambio parece pequeño, eso implica que cerca de 8 millones de personas han dejado de pertenecer a dicha porción activa, lo cual, naturalmente, hace que cualquier ganancia en empleo sea mucho más relevante en los indicadores mensuales. En términos históricos, esta tasa de participación actual es similar a la que tenía USA en la década de los 80, luego de varias crisis económicas por el precio del petróleo.

Así, es bastante notorio que le tomó a USA cerca de 20 años incrementar la tasa de participación, pero la crisis de 2008 la disminuyó de “un plumazo”. Los analistas argumentan que esta tasa de participación no volverá a los niveles precrisis, puesto que muchas personas han acudido a los seguros de desempleo y no volverán a buscar activamente un empleo. Mucho cuidado: un seguro de desempleo no es lo mismo que los beneficios de desempleo que se publican cada semana; y se ha encontrado que es mucho más probable que una persona con seguro no busque trabajo nuevamente, mientras una persona que se acoge al beneficio de desempleo sí lo haga.

Así, lo más probable es que la tasa de desempleo vuelva a subir en un futuro, pues muchas personas que actualmente no buscan un empleo de manera activa, sí lo harán cuando vean que encontrar un empleo sea mucho más probable. Esto lo saben los analistas y lo sabe la Reserva Federal.

Ahora bien, a pesar de los últimos datos de empleo mensuales, la realidad es que la creación de empleo no se puede, ni siquiera equiparar a la destrucción de empleo de hace tres años. En el punto más álgido de la crisis, llegamos a perder cerca de 700 mil empleos mensuales, pero ninguno de los meses positivos ha sido, ni siquiera, la mitad de este indicador.

Si bien existen algunos sectores que pueden jalonar el empleo en USA, lo cierto es que esos sectores algunas veces son inmóviles: si hay necesidad de mano de obra en construcción en el Estado X, eso no significa que disminuya el desempleo en el Estado Y. Pero hay una tendencia muy interesante hoy con el empleo en USA: en promedio, los trabajadores norteamericanos son hoy por hoy, los más productivos del mundo, y la diferencia en precio entre un bien manufacturado en una planta norteamericana frente a una planta en el extranjero, empieza a decrecer. Esto es particularmente importante para las empresas que están pensando en abrir plantas afuera, pues si la tendencia continúa, puede ser que se vuelva más costoso en términos relativos (y en Valor Presente Neto) producir en Asia que en Estados Unidos, si se suman todos los factores. Y si eso es así, la corrección del empleo de largo plazo, tomará un tiempo menos que el esperado inicialmente.