¿Qué necesidades tienen los inversores españoles en este momento?

Juan José González de Paz (Natixis)
Foto: cedida.

Durante el segundo trimestre del año, los gestores españoles de carteras aumentaron la exposición a renta fija en los tres perfiles de riesgo (conservador, moderado y agresivo). Las asignaciones a renta fija se incrementaron especialmente a la deuda emergente. Al mismo tiempo, se produjo una reducción en la asignación a mixtos, alternativos y convertibles, además de una reducción en las posiciones en renta variable europea y japonesa en favor de la estadounidense. En lo que respecta a los alternativos, se redujo la deuda long/short. Así lo revela el Barómetro de Carteras trimestral de Natixis Global Asset Management, que desvela tendencias mediante el análisis de 152 carteras modelo perfiladas y gestionadas por las 21 principales firmas de gestión patrimonial de España.

El estudio, elaborado por el departamento internacional de Análisis y Consultoría de Carteras que dirige James Beaumont y del que forma parte Juan José González de Paz, permite, además, conocer cuáles son las preocupaciones de los inversores españoles en este momento. Básicamente, son cuatro:

En primer lugar, encontrar estrategias que puedan ofrecer cierta diversificación. “No sólo ha aumentado la volatilidad de la renta variable, sino también las correlaciones entre carteras y algunas estrategias que debían ayudar a diversificar las mismas, como los fondos multiactivo y la renta variable long/short. El aumento de las correlaciones, combinado con una rentabilidad desigual durante el trimestre, explica parte de los flujos de salidas de fondos multiactivo durante el periodo. Con el fin de aumentar la diversificación, algunos inversores están empezando a considerar la deuda emergente. Para las carteras agresivas, los asesores también están considerando las materias primas, que experimentaron fuertes subidas durante el trimestre”, explican desde el departamento.

En segundo lugar, los inversores españoles están preocupados por cómo alcanzar sus objetivos de rentabilidad en un contexto de rendimientos muy bajos para la deuda soberana europea. “Tradicionalmente, los bonos periféricos compensaban los bajos rendimientos de la deuda pública de los países europeos centrales pero ahora, después de una considerable compresión de los diferenciales, los inversores están adoptando una estrategia de inversión más global, con un claro enfoque en renta fija estadounidense y de mercados emergentes. EE.UU. se considera un refugio que se está comportando mejor que Europa. En el caso de la deuda emergente, la estabilización del contexto macroeconómico también es una buena noticia para algunos inversores; por ejemplo, el diferencial de crecimiento del PIB entre los países desarrollados y los emergentes no se está ampliando”.

En tercer lugar, los inversores están adoptando un enfoque más global también en renta variable. “La baja rentabilidad y la alta volatilidad de la renta variable española y europea están llevando a los inversores a diversificar con renta variable de EE.UU”.

Por último, dada la gran depreciación de la libra esterlina después del Brexit, los inversores están más preocupados por su exposición a activos del Reino Unido sin cobertura. Sin embargo, el rápido repunte de los mercados de renta variable tras el referéndum redujo la preocupación del efecto del Brexit sobre los mercados financieros, por lo que esta inquietud han comenzado a desaparecer por la propia evolución del mercado.