Momento crítico para los mercados

Esta combinación de situaciones genera incertidumbre sobre la evolución de la economía mundial y la duda de cómo distribuir los ahorros para preservarlos en términos reales y obtener rentabilidad.

En primer lugar habría que intentar despejar la variable macro. Se espera que el mundo crezca al 3,5% en este año en curso y un 3,9% en el año 2013, proyecciones que han sido revisadas a la baja en los últimos meses. La contribución de los países a este crecimiento es muy desigual.

Los países desarrollados crecerían un 1,4% este año y un 1,6% el siguiente. En cambio las economías emergentes crecerían un 5,5% y un 6,0% respectivamente. El BRIC 6,5% y el 7,0% respectivamente.

USA crecería entre 1,9 y 2,4%, por debajo de lo proyectado a principios de año (2,4% a 2,9%).

En las últimas semanas ha habido datos contradictorios sobre esta economía que apuntan a un crecimiento menor y más lento e hicieron que el mercado inversor empiece a preguntarse si habría un QE3. Sin embargo, el FOMC decidió posponer esa decisión a la espera de una evolución en la crisis de la eurozona y solo anunció una prórroga de la denominada operación twist hasta fin de año por USD 270 mil millones.

La situación en Europa sigue teniendo un final abierto, hay mucho por hacer y cada vez menos tiempo. Sin embargo, el resultado de las elecciones en Grecia y las resoluciones del grupo de líderes del pasado 28 y 29 de junio han distendido en algo la situación. Se realizaron anuncios largamente esperados por los mercados respecto a la supervisión bancaria y la posibilidad de que ESM pueda capitalizar a bancos sin status senior. Pero existen elevados riesgos de implementación que habrá que monitorear hasta fines de año.

La resolución o no de la crisis de la deuda pone al mundo en una situación muy binaria con panoramas muy diferentes en caso de una salida exitosa de esta crisis o no.

Lo que es indiscutible es que la eurozona ya se encuentra en recesión, hoy calculada en una caída del PBI zonal del 0,5% para 2012, con un desempleo del 10% en promedio. Las preguntas que surgen son: Cuán profunda puede ser esa recesión en caso de no encontrar una salida adecuada a la crisis de la deuda, y en caso negativo, si podría Europa arrastrar al resto del mundo a la recesión.

Latinoamericana, no escapa a esta realidad dual. Su mayor economía, Brasil, pronostica un crecimiento del 2,5% muy inferior al 3,5% augurado al inicio de 2012.

Pero países como Chile, Colombia y Perú crecerán a tasas importantes del 4,5 al 6 %, replicando las asimetrías observadas en otros mercados.

Finalmente, los países asiáticos también tendrán crecimientos significativos. Indonesia, Tailandia y Filipinas, por ejemplo, también crecerán a altas tasas entre 5 y 6%.

Pero China esta agregando algo de zozobra, dado que aún no queda claro si tendrá el aterrizaje suave buscado por sus autoridades. Se espera que esta economía crezca en el orden del 8% en 2012, desacelerando del 9% de años anteriores, pero aún hay indicadores que ponen duda sobre esto y pronostican una caída aún mayor. Medidas de estímulo como las de 2008, deberán esperar hasta que haya más claridad sobre la crisis europea.

Conclusión: La situación macro global tiene un diagnóstico incierto y binario esencialmente derivado de la resolución de la crisis en Europa con impacto sobre el crecimiento de China y USA. Y existe una gran asimetría con el crecimiento esperado en los países emergentes.

En este contexto, la construcción de portafolios debe continuar en el terreno de la prudencia. Si bien hay áreas en el mundo con crecimientos elevados como indicamos, esas economías sufrirían con una mala resolución de la crisis europea.

Por el momento, vemos más adecuado un over weight en renta fija. En esta línea encontramos valor en el sector de high yield de USA dado sus muy buenos fundamentals respecto a crecimiento, nivel de deuda y default rate.

La deuda emergente también presenta buenas oportunidades luego de los anuncios mencionados y el sell-off de las últimas semanas. Los mercados locales de bonos también podrían ser una buena opción dado que esperamos más políticas acomodaticias de los bancos centrales.

En renta variable, commodities y metales creemos que todavía es tiempo de mantener un underweight hasta tanto haya más resoluciones. En acciones, privilegiamos US versus Europa en posiciones defensivas con renta global y buen track record de dividendos.

Profundizaremos más en nuestra próxima nota.