Los tres gestores de renta variable latinoamericana más exitosas

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pasukaru76, Flickr, Creative Commons

Los problemas de deuda de Argentina, los escándalos de corrupción en Brasil, el desplome del precio del petróleo en México y Venezuela, las protestas en Chile… En los últimos años, Latinoamérica ha sufrido diversas situaciones que han llevado a muchos inversores a abandonar la región en busca de mejores perspectivas de crecimiento y menores niveles de riesgo. ¿Cómo ha afectado esta situación a los gestores de fondos de renta variable latinoamericana?

Según Citywire Global, en la actualidad hay 93 gestores de fondos dedicados a fondos de acciones latinoamericanas, de los que 34 tienen un track-record de, al menos, cinco años. En ese periodo de tiempo (hasta el 31 de mayo) el índice MSCI EM Latin America TR se ha dejado un 22,5% y el gestor medio, un 23,98%. Sin embargo, la publicación destaca a tres gestores que sobresalen por su consistencia.

En el puesto número tres se sitúa Luis Carrillo, de JP Morgan Asset Management. Pese a haber perdido un 14,51% total desde 2010, Carrillo lo ha hecho mejor que la media del sector de renta variable latinoamericana cada año. El JPM Latin America Equity, fondo con un patrimonio de más de 880 millones de dólares que cogestiona con Sophie Bosch, está sobreponderado en los sectores financiero e industrial e infraponderado en consumo básico, energía y materiales. Entre las principales posiciones encontramos dos bancos brasileños: Itaú Unibanco, que representa el 6,2% de la cartera, y Banco Bradesco (4,8%).

El segundo gestor de renta variable latinoamericana más consistente es Ian Simmons, de Charlemagne Capital, que se ha anotado una pérdida del 12,49% en los últimos cinco años, la mitad que el índice general. Simmons gestiona el Charlemagne Magna Latin American, un fondo con una clara preferencia por Brasil y México y por los valores financieros.

Por último, la distinción de gestor más consistente en renta variable latinoamericana corresponde a Anders Damgaard, de la danesa ISI. A lo largo de los últimos cinco años, Damgaard ha logrado superar con creces al resto de gestores de su grupo y registra una pérdida de tan solo el 5,52%. Su fondo, el ISI Latin America Equities, muestra una fuerte sobreponderación en México y una importante infraponderación en Brasil, donde considera que las últimas medidas políticas representan “un cóctel tóxico para la economía”. A diferencia de Simmons y Carrillo, prefiere el sector de materiales a los valores financieros, donde está infraponderado. La empresa de servicios de telecomunicaciones America Movil (4%) y el banco mexicano Banorte (3,96%) representan las dos principales posiciones del fondo.